El presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) ha logrado mantener prácticamente el mismo nivel de popularidad desde que inició su gobierno hace ya más de tres años, esto a pesar de sus constantes confrontaciones con órganos autónomos, comunidad académica o medios de comunicación.
Sin embargo, aunque la imagen personal del mandatario es respaldada por la mayoría de las y los mexicanos, el desempeño de su gobierno no ha sido tan bien evaluado por ciudadanas y ciudadanos, según las encuestas.
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“Al presidente le da resultado como persona esta manera de estar generando pleito o confrontación (...) por alguna razón los mexicanos se sienten representados con este estilo de gobernar”, afirmó Federico Berrueto, director del Gabinete de Comunicación Estratégica, en entrevista para el noticiero “Por la mañana”, con Ciro Gómez Leyva.
De acuerdo con los resultados más recientes del seguimiento a la administración de López Obrador, llevado a cabo por el Gabinete de Comunicación Estratégica, el 54.6 por ciento de las y los mexicanos tiene una opinión buena o muy buena del presidente luego de cumplirse la primera mitad de su sexenio.
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Dicha cifra ha mostrado una reducción considerable en comparación con la registrada al inicio del gobierno de López Obrador, cuando el 68.1 por ciento de habitantes del país tenía una percepción positiva del tabasqueño, lo que representa una caída de 13.5 puntos porcentuales.
Al igual que los resultados presentados por el Gabinete de Comunicación Estratégica, la mayoría de las encuestas han posicionado al presidente López Obrador con una aprobación mayor al 50 por ciento durante los primeros tres años de su gobierno.
Esto aún a pesar de las críticas que ha recibido de parte de un sector de la sociedad ante sus constantes confrontaciones con órganos autónomos, como el Instituto Nacional Electoral (INE) o la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN); la comunidad académica; empresarios, etc.
“Esta querencia del presidente de confrontarse, puede que le dé resultado en términos de lo que la gente quiere ver en un presidente empeñado en hacer las cosas”, apuntó Federico Berrueto.
Por otra parte, la aprobación de su gobierno ha mostrado una drástica reducción a lo largo de los tres primeros años de su administración, pues, mientras que a inicios de 2019 el 86.2 por ciento de las y los mexicanos estaban de acuerdo con su forma de gobernar, en diciembre de este 2021 tan sólo cuenta con el respaldo de 60.8 por ciento, lo que representa una caída de 25.4 puntos porcentuales.
Lo que las encuestas muestran es la evaluación de Andrés Manuel López Obrador ciudadano, no como presidente, pues el resultado de las encuestas es muy distinto dependiendo si se pregunta la opinión acerca de su imagen personal o sobre los resultados de su administración, recalcó Berrueto.
La percepción sobre el avance que ha tenido el país también ha sufrido una drástica variación en comparación con el inicio del gobierno de López Obrador, pues mientras que en enero de 2019, el 68 por ciento consideraba que México estaba estancado, durante el último mes de este 2021, el 40.8 por ciento de mexicanas y mexicanos considera que el crecimiento continúa detenido.
Cifras registradas por el Gabinete de Comunicación Estratégica muestran que, si bien el presidente López Obrador ha logrado mantener niveles de popularidad relativamente altos durante la primera mitad de su sexenio, cada vez menos mexicanas y mexicanos están de acuerdo con las forma de gobernar del tabasqueño.