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Tras el accidente automovilístico ocurrido en un jardín de niños en el ejido La Compuerta, en Quilá, Culiacán, en donde perdieron la vida dos menores y resultaron heridos otros cuatro, ya se tiene un peritaje de la Procuraduría General de Justicia de Sinaloa (PGJE), la cual señala una falla en los frenos del automotor.
Falla que provocó que el repartidor de agua perdiera el control de la unidad; al respecto la PGJE solicitará orden de aprehensión contra el propietario de la empresa de agua purificada para acusarlo de los mismos delitos, homicidio doloso, al comprobarse que el chofer iba en perfecto estado de salud.
En este último punto, resaltó la versión que el conductor de la unidad sufría ataques epilépticos, situación que no se ha confirmado, se detalló en el espacio de López Dóriga.
El procurador del estado, Marco Antonio Higuera, señaló que se está a la espera de más información al respecto; asimismo, se sabe que fallaron los frenos al no tener mantenimiento la unidad, y además el propietario de la empresa, según el testimonio del conductor y propietario de la unidad, tenía conocimiento de esta situación.
Mientras tanto que están siendo velados los cuerpos de los dos niños fallecidos, y en el Hospital Pediátrico de Sinaloa está en graves condiciones otra menor.
Con información de Víctor Torres.
ohj