La extradición a Estados Unidos desde Reino Unido del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, quedó en suspenso este martes, después de que el Tribunal Superior de Londres pidiera garantías de que no enfrentará la pena de muerte.
Los fiscales estadounidenses pretenden juzgar a Assange, de 52 años, por 18 cargos, todos menos uno en virtud de la Ley de Espionaje, por la divulgación por parte de WikiLeaks de archivos militares y cables diplomáticos confidenciales de Estados Unidos.
Después de que Reino Unido diera luz verde a su extradición el año pasado, los abogados de Assange lanzaron en febrero otro intento ante los tribunales ingleses para impugnar esa decisión.
En su sentencia, dos jueces superiores le dieron provisionalmente permiso para presentar un recurso completo frente a la extradición por tres motivos, pero sólo si Estados Unidos no ofrecía "garantías satisfactorias" sobre las cuestiones planteadas.
¿Julian Assange puede ampararse en Primera Enmienda (libertad de expresión)?
Julian Assange, nacido en Australia, podría no estar habilitado a ampararse en el derecho a la libertad de expresión de la Primera Enmienda por no ser ciudadano estadounidense y, aunque ninguno de los cargos existentes conlleva la pena de muerte, más adelante podría enfrentarse a un delito capital como la traición, lo que significaría que sería ilegal extraditarlo.
Los abogados de Assange habían destacado un comentario del expresidente de Estados Unidos Donald Trump, quien dijo en 2010, al hablar de WikiLeaks: "creo que debería haber como una pena de muerte o algo así", según la sentencia.
Los jueces invitaron a las autoridades estadounidenses a dar garantías sobre estas cuestiones, diciendo que si no las daban antes del 16 de abril, se concedería a Assange permiso para apelar.
Sin embargo, rechazaron el argumento de sus abogados de que el caso estaba motivado políticamente o de que no tendría un juicio justo. También afirmaron que su acusación de que agentes de la CIA habían planeado secuestrarlo o asesinarlo no podría tenerse en cuenta en caso de que se le permitiera apelar.
Se ha programado una nueva audiencia para el 20 de mayo, y su extradición (que, según su equipo de campaña, podría haber sido inminente en función de la sentencia) ha quedado en suspenso.
Julian Assange lleva 13 años de lucha legal
WikiLeaks saltó por primera vez a la fama en 2010, cuando publicó un video militar estadounidense que mostraba un ataque de helicópteros Apache en Bagdad en 2007 en el que murieron una docena de personas, entre ellas dos periodistas de Reuters.
A continuación, difundió miles de archivos secretos clasificados y cables diplomáticos que dejaban al descubierto valoraciones a menudo muy críticas de Estados Unidos sobre líderes mundiales que, según este país, ponían en peligro la vida de sus agentes.
Los numerosos partidarios de Assange lo aclaman como un héroe antisistema que está siendo perseguido, a pesar de ser periodista, por sacar a la luz irregularidades y presuntos crímenes de guerra de Estados Unidos.
Las autoridades estadounidenses afirman que no se le procesa por la publicación de los materiales filtrados, sino por el acto delictivo de conspirar con la exanalista de inteligencia del ejército estadounidense Chelsea Manning para obtenerlos ilegalmente.
Assange lleva más de 13 años luchando contra diversas causas judiciales en Reino Unido, de los cuales siete los ha pasado encerrado en la embajada de Ecuador en Londres tras eludir la libertad bajo fianza, y los últimos cinco en una cárcel de máxima seguridad.
Salud de Julian Assange se estaba deteriorando
Su hermano, Gabriel Shipton, dijo que sufría "un rápido deterioro de su salud física y mental".
"Estoy asombrado por la decisión. El caso debería haber sido desestimado", dijo a Reuters Stella Assange, que se casó con el fundador de WikiLeaks en prisión. "Julian sigue en riesgo de extradición, en riesgo de pena de muerte, en riesgo de 175 años de prisión".
La abogada de Assange, Jen Robinson, dijo por su parte que, basándose en casos anteriores, las garantías de Estados Unidos "no valen ni el papel en el que están escritas".
Nick Vamos, exjefe de extradición de la fiscalía de la corona británica, dijo que debería ser sencillo para Estados Unidos proporcionar las garantías.
"Creo que el Gobierno de Estados Unidos tendrá pocas dificultades para proporcionar estas garantías y finalmente se ordenará la extradición del señor Assange", sostuvo.
Si la Corte Suprema confirma la decisión de extradición, un nuevo desafío de Julian Assange consistirá en presentar un recurso ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) para bloquearla.