El Gobierno de Texas, encabezado por el republicano Greg Abott, inició una campaña que expone el viacrucis que enfrentan los migrantes, con el fin de disuadir la entrada ilegal de quienes busquen entrar a territorio estadounidense por la frontera sur.
La campaña consiste de diversos carteles en donde también se incluyen mensajes intimidatorios sobre las adversidades que enfrentan miles de mexicanos y centroamericanos en busca de mejores oportunidades y seguridad.
“¿Cuánto pagaste porque violen a tu hija?”, “Tu esposa y tu hija van a pagar el viaje con su cuerpo, los coyotes mienten”, o “Si cruzas ilegalmente hacia Texas serás encarcelado”, son sólo algunas de las frases que incluyen estos carteles.
En rueda de prensa en la ciudad de Eagle Pass, cerca de la frontera con México, Abott argumentó que estos anuncios dan "una imagen realista de lo que les sucederá en su viaje o si cruzan ilegalmente a Texas".
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“No es sólo disuadirlos de venir, sino ayudarlos a comprender las consecuencias de ello y que nuestro estado continúe tomando todas las medidas necesarias hasta que el presidente electo Donald Trump regrese a la Casa Blanca”, externó.
A finales de noviembre, el gobierno de Abott ofreció al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, alrededor de 600 hectáreas para construir campos de deportación de "criminales violentos". Además, el republicano advirtió que si México no logra reducir el flujo migratorio, impondrá aranceles del 25 por ciento a todo producto que entre a territorio estadounidense.
Biden supera a Trump en deportaciones
La gestión de Joe Biden, presidente estadounidense saliente, deportó a 271 mil 484 inmigrantes durante el año fiscal 2024, que terminó en septiembre pasado, la mayor cifra en una década, que supera cualquier año de las que realizó Trump en su primera gestión.
Según el informe anual, citado este jueves por el Washington Post, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, en inglés) casi duplicó las deportaciones del periodo anterior, cuando envió de regreso a sus países de origen a 142 mil 580 personas.
La cifra también supera el número de deportaciones anuales realizadas por Trump, que registró su máximo en 2019 cuando deportó 267 mil 258 inmigrantes.
Para 2017, cuando comenzó el gobierno del republicano, ICE deportó a 226 mil 119 inmigrantes, una cifra menor que los 240 mil 255 extranjeros que expulsó en 2016, durante la administración de Barack Obama.
En 2018, ICE envió a sus países de origen a 256 mil 085 personas y en 2020, cuando se declaró la pandemia de la COVID-19 fueron menos, 185 mil 884.
