El Gobierno de Texas ofreció al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, unas 600 hectáreas para construir campos de deportación de "criminales violentos".
"Le escribo a ofrecer formalmente 1,402 acres de tierra en el condado de Starr, Texas, para construir instalaciones de deportación", expresó en un comunicado el Gobierno de Texas, cargo de Greg Abbott, quien firmó en diciembre pasado una ley fronteriza que convirtió en un delito estatal la entrada ilegal a Texas.
Asimismo, señaló que está listo para formalizar la donación con el Departamento de Seguridad Nacional, el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas o la Patrulla Fronteriza de los Estados Unidos.
Gregg Abbott anunció la donación de hectáreas luego de que Donald Trump reveló su intención de declarar una emergencia nacional y utilizar al ejército de Estados Unidos para impulsar sus planes relacionados con la deportación masiva de inmigrantes indocumentados.
Campos de deportación: así son las hectáreas que donó Texas a Trump
El gobernador explicó que adquirió el terreno en octubre pasado, por lo que de inmediato construyó el muro fronterizo de púas entre Texas y México, como parte de la Operación Flat Top.
"Durante el operativo se encontraron evidencias de tráfico, además de escondites de armas e incluso artefactos explosivos improvisados (IED). La Operación Flat Top ha sido un gran éxito, ya que toda la actividad relacionada con los cárteles se ha reducido a cero", dijo.
Recordó que antes de la compra, la zona era "tierra de nadie", pues el anterior dueño se negó a instalar el muro fronterizo, lo cual permitió a "miembros de cárteles y criminales violentos abusar sexualmente de mujeres y niños migrantes" en ese lugar durante un tiempo.
Greg Abbott ostentó que, durante su gobierno, ha obtenido "importantes victorias" contra cárteles en la frontera, lo que frenó actividades delictivas como el tráfico de personas y drogas.
"Estoy comprometido a utilizar todos los medios disponibles a mi disposición para lograr una seguridad operativa completa de nuestra frontera", añadió el gobernador de Texas.