Guillermo Salinas, influencer y sobrino de Ricardo Salinas Pliego, fue desalojado por la policía de Ibiza, España. debido a que iban a demoler un establecimiento turístico conocido como Casa Lola. En TikTok, el mexicano subió una grabación donde se aprecia el momento en que varios policías llegan a la puerta de la habitación que estaba alquilando.
"Para los que tenían la duda sobre si los ricos, a veces, tenemos un mal día", fue el mensaje que escribió Guillermo Salinas en TikTok, a la par que subió un video menor a un minuto, donde él argumenta que está alquilando la habitación y le exige a las autoridades que presenten una orden de desalojo.
En la grabación se aprecia como los agentes de seguridad abren la puerta gracias a una palanca, para luego ingresar al cuarto donde estaba el sobrino de Salinas Pliego y así ejecutar la orden de desalojo emitida por el ayuntamiento del municipio de Sant Josep. "Tengo esta propiedad privada alquilada, soy Guillermo Salinas, no estoy cometiendo ningún delito", dijo en su defensa.
Uno de los policías trata de dialogar con el influencer mexicano y le enseña el documento donde se va a iniciar la demolición de Casa Lola, a lo que Salinas responde "si comienzan a demoler, ese no es mi problema", mientras trata de atrincherarse al interior del cuarto y graba a los uniformados.
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"¡Abra la puerta!", fue una de las órdenes que dan los policías, para luego abrir a la fuerza e ingresar. Hasta ahora, la grabación cuenta con 7.3 millones de reproducciones, más de 565 mil likes y más de cuatro mil comentarios, algunos de ellos de desaprobación, "Y los polis, ¿Hablo en chino o qué papi? abre la puerta".
De acuerdo con la agencia EFE, las autoridades detuvieron a tres personas durante el desalojo de Casa Lola, uno de ellos es un empleado; hasta ahora se desconoce si Guillermo Salinas fue uno de los aprehendidos por las autoridades. En dicho operativo participaron integrantes de la Guardia Civil del pueblo de Cubells en Ibiza.
El sobrino de Salinas Pliego no fue el único mexicano afectado por el desalojo, pues al menos otros 20 connacionales vieron como se interrumpían sus vacaciones a causa del inicio de las obras de demolición en Casa Lola. El Ayuntamiento local aprobó su demolición, desde el pasado 21 de julio, debido a que opera sin permisos.