El fabricante de artículos deportivos Adidas ha interrumpido con efectos inmediatos su colaboración con la Federación Rusa de Fútbol, dijo a EFE una portavoz de la empresa.
Esta decisión se produce después de la invasión rusa de Ucrania el jueves pasado.
Adidas facturó 584 millones de euros en Rusia/Comunidad de Estados Independientes en 2020, un 11 por ciento menos que en 2019 (658 millones de euros en 2019) por los efectos negativos de la depreciación del rublo.
Esta cantidad representa un 3 por ciento del volumen de negocios total de Adidas, que fue la patrocinadora de Rusia en el mundial del 2018.
El beneficio operativo de Adidas en Rusia/CEI cayó en 2020 un 3 por ciento, hasta 162 millones de euros (167 millones de euros en 2019).
Aumentan sanciones a Rusia
El rechazo a la invasión de Ucrania y las consiguientes sanciones impuestas a Rusia han provocado un éxodo de multinacionales extranjeras que abandonan o reducen sus operaciones en suelo ruso, tras tres décadas de beneficiarse del lucrativo mercado postsoviético.
La exclusión de algunos bancos rusos del sistema de pagos SWIFT, el cierre por la Unión Europea y Canadá de su espacio aéreo, correspondido por Moscú, y el efecto de las penalizaciones internacionales, con un desplome del rublo del 30 por ciento el lunes, hacen que las empresas juzguen demasiado alto el riesgo reputacional y financiero de seguir en Rusia.
Gigantes del petróleo, firmas de mensajería y comunicaciones o fabricantes de vehículos se desprenden estos días de sus activos o suspenden sus exportaciones hasta próximo aviso, lo que contribuye al aislamiento del régimen de Vladímir Putin.