De la historia del mundo, Ómicron, la nueva variante de COVID-19, es el virus que más rápido se propaga, afirman especialistas. A continuación te explicamos la razón.
En entrevista para el diario El País, Roby Bhattacharyya, experto en enfermedades infecciosas del Hospital General de Massachusetts, Estados Unidos, aseguró que la nueva variante del virus SARS-CoV-2 es aún más contagiosa que el sarampión, uno de los virus más contagiosos.
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Por ejemplo, explicó que, en un periodo de 12 días, una persona con sarampión puede contagiar a otras 15 no vacunadas y un caso de Ómicron puede producir hasta más de 200 contagios, debido a que se propaga en menor tiempo.
“Un caso de sarampión daría lugar a 15 casos a los 12 días. Un caso de Ómicron originaría otros seis a los cuatro días, 36 casos a los ocho días y 216 a los 12 días […] es una propagación increíblemente rápida”, afirmó.
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Sin embargo, señaló que la variante detectada en Sudáfrica se enfrenta a las personas que ya se contagiaron de COVID y a las vacunadas, por lo que estima que un paciente con Ómicron sólo puede contagiar a otras tres personas.
Por su parte, Anton Erkoreka, director del Museo Vasco de Historia de la Medicina, sostuvo que Ómicron es el “virus más explosivo y el de más rápida difusión de la historia”, pues señaló que la peste negra del siglo XIV o la gripe rusa de 1889 tardaron años o meses en expandirse por el mundo, sin embargo, la nueva variante tardó poco menos de cuatro semanas para tener presencia en todo el planeta.
“La variante Ómicron ha batido su récord de expansión”, reiteró Erkoreka.
Ómicron, ¿la más grave de todas las variantes?
A la fecha, existen seis estudios que explican la razón por la que Ómicron es más contagiosa y menos letal.
Señalan que la variante solo tiene la capacidad de infectar las vías respiratorias altas, pues notaron que se puede multiplicar 70 veces más rápido en los bronquios, sin embargo, no invade los pulmones, donde es 10 veces menos eficiente.
Además, Bhattacharyya señala en el último informe del Imperial College de Londres, que la variante Ómicron es 25 por ciento menos grave que la Delta en personas no vacunadas y sin antecedentes de COVID.
Pese a los datos anteriores, expertos aún dudan de que Ómicron sea menos grave que las variantes anteriores.
Por ejemplo, el mismo Bhattacharyya considera que probablemente Ómicron es más grave que las otras cepas, pues explicó que la variante Alfa, detectada a finales de 2020 en Reino Unido, es 50 por ciento menos grave que la Delta.
“Dada la rapidez con la que se está extendiendo, la Ómicron probablemente causará mucho daño en un periodo de tiempo más corto”, dijo.
Por su parte, William Hanage, codirector del Centro de Dinámicas de las Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Harvard, explicó que Ómicron parece menos grave que Delta debido a que ahora las personas tienen más defensas que en las olas de contagios anteriores, gracias a las vacunas y el contacto con el virus.
“Muchas infecciones por Ómicron, especialmente en las personas vacunadas, serán leves, comparables a un breve resfriado. El problema es que habrá otras graves, por lo que, al ser tan transmisible, el número total que necesitará atención médica pondrá en apuros el sistema de salud, tanto para atender la COVID como para otros temas”, advirtió.
Con información de El País