La historia de las zonas poniente y sur del estado de Morelos están poco documentadas.
Una de las narraciones más importantes es la del "Padre Minos", de nombre José Agapito Mateo Minos Campuzano, quien fue autor de
- "Apuntaciones Históricas de Xoxutla a Tlaquiltenango"
- "Folleto Nahualco".
Estas dos obras incluyen la historia regional del sur de Morelos y la investigación de algunos documentos prehispánicos.
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La historia del Señor de Tula
El 14 de septiembre de 1722 el arriero José cerón intentaba cortar una "cubata".
Esta referencia es oscura pero parece que se refiere a un árbol "acacia" o un árbol frondoso.
José Cerón empezo a dar hachazos al tronco del árbol y notó que a cada golpe manaba sangre del árbol y dentro del árbol aparece un crucifijo de color negro.
Esto sucedió cerca de un lugar llamado "potrero de Tula", de ahí el nombre de "Señor de Tula". Se supone que el lugar era cercano a la Hacienda de San Gabriel.
Ya en la Capilla de San Gabriel inicia una serie de "apariciones y desapariciones", cuatro veces por lo menos, lo que preocupó a los habitantes del lugar, quienes decidieron trasladar la figura a la capilla de Tlaquiltenango.
La imagen llegó a Tlaquiltenango el 1° de enero de 1723. esta es la fecha que se toma como base para celebración al "Señor de Tula" hasta nuestros días.
el quinto viernes de cuaresma y estando el cristo en una cámara, dentro de la iglesia, bien cerrada, con chapas nuevas y bajo dos llaves, estaban celebrando misa, con la imagen enfrente y después de la elevación de la hostia, todos los presentes se dieron cuenta de que la imagen había desaparecido.
La imagen reapareció, pero en la iglesia de Xoxutla (Jojutla). La imagen es llevada otra vez a Tlaquiltenango.
El 4 de julio de 1723 la imagen volvió a desaparecer y a reaparecer en Jojutla. De vuelta a Tlaquiltenango. El 7 de septiembre, mismo caso.
El 14 de septiembre de 1723 ocurrió lo mismo, pero la gente empozó a rumorear que a la figura milagrosa no le gustaba estar en Tlaquiltenango y se decidió dejarla en Jojutla hasta la fecha.
Se decidió, además seguir celebrando al Cristo Negro en el primer día del año.
El nuevo santuario al Señor de Tula.
Tres santuarios al alojado al Señor de Tula, el último de éstos se sitió dentro de la parroquia de San Miguel Arcángel.
El santuario se construyó al poniente de la iglesia de San Miguel Arcángel con aportaciones de feligreses.
Este santuario fue destruido por el sismo del 19 de septiembre del 2017.
Como parte del proyecto de reconstrucción de Jojutla, se inicio la construcción del nuevo Santuario del Señor de Tula, obra encargada al arquitecto Francisco Franco junto con Dellekamp / Schleich + AGENdA Agencia de Arquitectura.
La obra fue realizada por mano de obra de habitantes de Jojutla y fue terminada hacia enero de 2020.
Es una de las obras arquitectónicas más emblemáticas del Sur de Morelos.