En México, desde hace varios años, se ha convertido en una tradición las bodas colectivas, las cuales son promovidas por las oficinas de gobierno de los diferente Estados de nuestro país.
Las bodas masivas, particularmente, se realizan cada 14 de febrero, Día del Amor y la Amistad, sin embargo, ya es más común observar este tipo de uniones en cualquier época del año.
Dicen que en "el amor no hay imposibles" y en Nuevo León 38 internos dieron el 'sí' para unir sus vidas en matrimonio.
¿Qué es una boda colectiva?
Una boda masiva o colectiva se trata de una ceremonia de matrimonio a la que acuden un gran número de parejas y se casan al mismo tiempo y en el mismo lugar.
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De acuerdo con los archivos históricos, la primera boda colectiva se realizó en el 324 a. C., cuando Alejandro Magno se casó con Stateira II, la hija mayor de Darío, el rey de Persia.
Durante la ceremonia, se aprovechó para unir en matrimonio a 80 parejas en total, entre ellos, a varios de sus principales oficiales y destacados soldados con otras mujeres persas.
En nuestro país, la mayoría de los Estados, ofrecen facilidades para fomentar las bodas masivas en las parejas de cualquier edad y, sobre todo, para aquellos que han estado viviendo juntos desde hace un tiempo y puedan formalizar su relación, accediendo a los beneficios jurídicos que se obtienen al oficializar el matrimonio.
Dependiendo del Estado de México en el que seas residente, cada uno ofrece ahorros para las parejas, como el pago de los derechos para el enlace civil, los análisis médicos, trámites como las actas de nacimiento, lo que hace muy atractivo las bodas colectivas.
Arman boda colectiva en el Penal de Apodaca en Nuevo León
El amor es más grande que cualquier otro sentimiento, y un ejemplo fueron 38 reos del Penal de Apodaca que unieron su vida en matrimonio con sus parejas en Nuevo León.
Pese a estar pagando su deuda ante la justicia, la Agencia de Administración Penitenciaria, junto al gobierno del estado y la Asociación Vicentinas, realizaron la ceremonia masiva a donde asistieron como invitados, familiares de los internos, como sus hijos, madres o padres.
El matrimonio colectivo se celebró en uno de los patios contiguos a una iglesia en el interior del centro penitenciario, donde las parejas tuvieron la oportunidad de vestirse de blanco, darse el “sí, acepto”, disfrutar del vals, el banquete y una pequeña celebración.
Mesas con manteles blancos, arreglos florales y música fueron parte de la celebración en el Penal de Apodaca que se convirtió en un centro social por algunas horas.
Tras el trámite y dar el "sí, acepto", las parejas bailaron el tradicional vals con la emotiva canción "Cielo" del cantante mexicano Benny Ibarra y luego disfrutaron del banquete que consistió en el tradicional "asado de boda".
"Celebro hoy porque es un paso maravilloso para este estado, que es crear condiciones de igualdad y de derecho", destacó Dulce Mora, Subsecretaria de Protección Social y Oportunidades de la Secretaría de Igualdad de Nuevo León.
Lo que parecía imposible, se volvió realidad para 38 parejas y su historia de amor que culminó con una boda colectiva en el Penal de Apodaca en Nuevo León.