Los rumores que apuntan a que el actual Acuario de Mazatlán fungirá como un centro de investigación y preservación de la vida marina, la flora y la fauna endémica de la zona una vez que se apertura el acuario Mar de Cortés, son falsos.
De acuerdo al Director del sitio, Pablo Rojas Zepeda, hasta el momento ninguna autoridad ha dejado claro cuál será el futuro de la paramunicipal.
El director del recinto recreativo manifestó que son cuestiones políticas las que están buscando terminar con el acuario, lo cual debería repensarse ya que este espacio es patrimonio de los mazatlecos y por años ha servido como espacio que buscar impulsar la educación ambiental, así como la diversión tanto de chicos y grandes.
“Las áreas todavía están en negociaciones. Esta es un área que no está concesionada, no depende del nuevo acuario, hay que tenerlo muy claro. Estás áreas del acuario no están concesionadas, corresponde al municipio determinar qué destino se le va a dar, es un patrimonio que costó mucho dinero. Fueron cuestiones políticas terminar con esto”, comentó.
Espera que al final de las negociones que todavía se están desarrollando, el acuario de Mazatlán se quede al menos como un espacio para el estudio y la divulgación de la protección de la vida silvestre.
Actualmente este recinto alberga más de 3 mil organismos que pertenecen a alrededor de 147 especies, además se genera 140 empleos y sostiene a personas jubiladas. Diariamente el centro recreativo, a pesar de la pandemia recibe hasta 3 mil visitantes de los cuales algunos son turistas, locales, estudiantes provenientes de escuelas de escasos recursos y profesionistas que buscan formarse en la rama de la biología.