La Paz

RESCATE DE PERROS

(VIDEO) ¿Lleno jefe? Enamórate de Blacky, el perrito que despacha gasolina en La Paz

En 2018 un cachorro llegó a una gasolinera en busca de comida y techo, este fue adoptado por los empleados del lugar y hoy forma parte del equipo de trabajo.

Blacky, el perrito despachador de gas en La Paz.Brinda excelente atenciónCréditos: Daniela Mena
Escrito en LA PAZ el

Historias de animales que fueron abandonados a su suerte son muchas, lamentablemente esta problemática social es muy común, sin embargo, hay otras personas que hacen el bien y terminan dando una segunda oportunidad de vida a los lomitos, tal es el caso de Blacky, un perro que hoy no solo tiene un techo, también forma parte de la nómina de una empresa en La Paz, Baja California Sur. 

Blacky fue adoptado por los trabajadores de una gasolinera de la ciudad hace seis años, en 2018 llegó a la estación buscando comida, amor y un hogar, en aquel momento era solo un cachorro que fue abandonado a suerte.

Cortesía: Tannya Marmolejo

Pero la adopción tiene su costo, no solo encontró una familia que le cambiaría la vida, también un lugar donde trabajar y es que hoy, Blacky tiene su propio empleo, encontró la manera de pagar su alimento y sus visitas al veterinario, fue contratado para ocupar el puesto de “supervisor de áreas verdes de la gasolinera Repsol”.

Cortesía: Tannya Marmolejo

Cuenta con su propio uniforme y gafete que fue diseñado por sus compañeras de trabajo.

Adriana Márquez

“El gafete se lo elaboró aquí mismo una compañera, también su uniforme, primero se lo diseñamos con lo que teníamos aquí y de las camisas de compañeros, pero después ya la empresa le mandó a elaborar un gafete oficial con uniforme porque él es parte nuestro equipo”, dijo Ana Martín Carlón, trabajadora de dicha gasolinera.

Por su excelente atención al cliente Blacky se gana sus propinas

La obediencia y carisma caracterizan a este perro, los clientes que constantemente visitan esta gasolinera en La Paz, también lo consideran parte del equipo, ya lo conocen y admiran, hay quienes hasta le dan propina o llevan alimento.

Cortesía:Tannya Marmolejo

 “Antes se quedaba con una compañera en las noches y ya en el día lo traía, cuando era más chico, después nos turnábamos para llevárnoslo y ahora ya está acá siempre, lo queremos mucho y nos hace caso siempre”.

Para los empleados y clientes la historia de Blacky es un ejemplo de la importancia de la adopción de mascotas.

Adriana Márquez

Este lomito demuestra que los animales no solo pueden formar parte de un círculo familiar en un hogar, también pueden convivir en otros espacios llevando amor y cariño a todas las personas.