Las oficinas de la Comisión Estatal de Derechos Humanos de Baja California Sur (CEDHCS) continúan cerradas a más de una semana de que trabajadores estallaran un paro laboral para exigir la destitución de la presidenta de dicho organismo, Charlene Ramos.
El gobernador del estado, Víctor Manuel Castro Cosío, llamó al diálogo para resolver este conflicto, dijo que el Poder Legislativo es quien debe responsabilizarse para mediar el caso. Propuso que se conforme una comisión con los tres poderes de gobierno para que intervengan y se solucione el conflicto para que las oficinas sean devueltas.
“Mi opinión es muy clara, yo lo he expresado: de ningún modo debemos mantener estos conflictos, lo he propuesto con mucha claridad y lo voy a hacer público, que se forme una comisión de los tres poderes, que se analice bien y dictaminen. Yo creo que el Congreso está buscando la manera de dialogar, dialogar y dialogar”.
Las oficinas se encuentran bloqueadas desde el lunes 8 de enero, un grupo de trabajadores entraron en paro laboral tras denunciar trato cruel y degradante, amenazas e intimidación, violencia de género, acoso laboral constante y abuso de poder por parte de la ombudsman. Trabajadores aseguran que no levantaran las banderas y los candados hasta que no sea destituida del cargo.
Te podría interesar
Por su parte, Charlene Ramos ha negado las acusaciones en su contra e incluso ha denunciado a trabajadores por la toma ilegal de las instalaciones. Al no existir un diálogo entre ambas partes, se han creado oficinas provisionales en la Escuela de Música del estado para brindar asesoría a las personas que requieren interponer quejas ante la CEDHBCS.