La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) informó que luego de las denuncias interpuestas tras el incendio y hundimiento de un yate en la playa Balandra, en Baja California, inspectores iniciaron con una serie de recorridos por la zona afectada por el derrame de combustible a fin de recabar elementos que constaten el daño ambiental causado.
Además, la Procuraduría informó que actuará en el ámbito de sus competencias con la imposición de las medidas y sanciones contempladas en la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente.
De igual manera, presentará la denuncia penal contra quien resulte responsable por la probable comisión de delitos contra el ambiente, en ejercicio de su función de vigilar que se respete el derecho humano a un ambiente sano.
¿Qué pasó en la playa Balandra?
Un tesoro natural, considerada la más bonita del país, la playa Balandra fue cerrada a causa de un derrame de combustible que dejó el incendio de un yate, el cual, de acuerdo con el reglamento, no debía estar en dicha zona.
La playa es Patrimonio de la Humanidad declarado por la Organización de Naciones Unidas para la Educación y la Cultura (Unesco), cada año sus aguas turquesas atraen a miles de turistas que benefician los ingresos de la entidad y habitantes de Baja California Sur, pero este año las cosas pueden ser diferentes.
El accidente que provocó la embarcación que navegaba en un horario no permitido ha teñido el mar y la arena de negro, sin embargo, no se reportaron muertes que lamentar, de acuerdo con información de la prensa local, los 12 tripulantes a bordo resultaron ilesos.
La magnitud del desastre sigue sin determinarse, el yate continúa hundido y el derrame de diésel podría continuar. Alberto Guillén, biólogo marino entrevistado por BBC, dijo que, aunque las labores de limpieza podrían concluir en los próximos días, la playa no será reabierta de inmediato, pues se requiere evaluar con detenimiento el impacto en el fondo marino.