El oído de los perros suele ser más sensible que el del humano, por lo que las explosiones de fuegos artificiales no solo les resultan más perturbadoras, sino que les pueden dañar gravemente su capacidad auditiva.
Los fuegos artificiales pueden emitir sonidos de hasta 190 decibelios, es decir, 110 a 115 decibelios por encima del rango de 75 a 80 decibelios, donde comienza el daño para el oído humano. Por lo tanto, los cohetes generan un nivel de ruido más alto que el de los disparos.
Los ruidos causados por la pirotecnia pueden provocar una pérdida de audición. Además de este daño, los sonidos causados por los fuegos artificiales dañan a los animales al ser una causa de que sufran miedo incluso, desencadenar fobias a muchos animales al aumentar las reacciones de pánico a los ruidos fuertes con la exposición repetida a estos.
El médico veterinario, José Alejandro Angulo, destacó que es durante esta temporada cuando incluso aumentan las desapariciones de animales de compañía, esto se debe al miedo de los fuegos artificiales, los perros salen huyendo por el sonido.
“Es una temporada donde, sobre todo los perros, están sometidos a mucho estrés debido a la pirotecnia. Es importante que las mascotas se encuentren en un lugar seguro y amplio de lo que habitualmente están, no recomiendo que los dejen en lugares pequeños porque se asustan y se pueden estar lanzando contra las paredes, tampoco cerca de ventanas porque que también se lanzan, nos toca ver como llegan lastimados por vidrios de ventanas”.
“Ellos lo que quieren es salir corriendo, escapar por el miedo, al estar en un lugar amplio tienen espacio para no lastimarse, si está en sus posibilidades pueden ponerles música clásica, este tipo de sonido les relaja mucho y distrae del ruido”.
Los más perjudicados son los perros debido a que tienen el sentido del oído más desarrollado, los gatos también se someten a un estrés, pero no tan importante como los caninos. El médico recomendó a quienes van a salir de vacaciones y dejaran solas a las mascotas en casa, se les deje bien encerrados y protegidos, aunque lo ideal es poder estar con ellos en casa, si se ha decidido salir del hogar, es importante dejar en un lugar seguro a la mascota.