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7 errores más comunes que no tenías ni idea y están encogiendo tu ropa o dañándola

Estas son las prácticas más frecuentes que están arruinando tus prendas favoritas y no lo sabías.

Los errores más comunes que están dañando tu ropa Créditos: ESPECIAL
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Todos hemos tenido esa experiencia incómoda de sacar nuestras prendas de la lavadora y descubrir que nuestra camiseta favorita ha encogido de manera inexplicable o que esa prenda delicada parece haber perdido su color y suavidad. Es por ello, que en esta ocasión te revelaremos los siete errores más comunes que no tenías ni idea y están encogiendo tu ropa o dañándola.

Aunque el lavado de ropa es una de las tareas más cotidianas, la realidad es que muchas personas no la realizan correctamente, lo cual puede arruinar nuestras prendas favoritas en una sola lavada.

Los errores más comunes que están dañando tu ropa 

Y es que hay varios errores comunes que cometemos a la hora de lavar y cuidar nuestra ropa, mismos que están encogiendo tus prendas o dañándolas de forma irreversible.

No leer las etiquetas de cuidado

Uno de los errores más básicos pero perjudiciales es ignorar las etiquetas de cuidado en las prendas. Cada pieza de ropa tiene instrucciones específicas sobre cómo lavarla y secarla para mantener su forma, tamaño y color.

Usar temperaturas altas sin necesidad

El agua caliente es uno de los mayores culpables del encogimiento de la ropa. Muchos piensan que lavar a altas temperaturas garantiza una limpieza más profunda, pero la realidad es que puede hacer que los tejidos se deterioren más rápido. Las fibras naturales como el algodón y la lana son especialmente propensas al encogimiento con calor, por lo que es recomendable usar agua fría o tibia para la mayoría de las prendas, especialmente las más delicadas.

Sobrecargar la lavadora

Al no dejar suficiente espacio para que el agua y el detergente circulen adecuadamente, las prendas no se lavan de manera eficiente y tienden a frotarse demasiado entre sí. Esto puede causar que los tejidos se desgasten o que se formen bolitas en las prendas de lana o sintéticas.

Usar demasiada cantidad de detergente

Usar demasiado detergente puede dejar residuos en la ropa, que no solo hacen que se vea opaca, sino que también pueden dañar las fibras con el tiempo. Además, el exceso de detergente también puede hacer que la ropa se deforme y pierda su elasticidad.

Dejar la ropa mojada por mucho tiempo

Dejar la ropa mojada dentro de la lavadora después de un ciclo es otro error común que afecta tanto la forma como el color de las prendas. El ambiente húmedo puede hacer que los colores se destiñan, las fibras se debiliten y la ropa adquiera malos olores.

No cuidar las prendas delicadas

Las prendas delicadas, como la seda, el lino o el encaje, requieren un trato especial. A menudo, los errores ocurren cuando se meten en la lavadora sin ningún tipo de protección. Las bolsas de lavandería o el lavado a mano en agua fría son una excelente opción para preservar la integridad de estas piezas.

Usar la secadora de forma indiscriminada

La combinación de calor y fricción puede ser fatal para las fibras más finas y propensas al encogimiento, como la lana y el algodón. Es importante revisar las etiquetas para ver si una prenda es apta para secadora y, en caso de duda, optar por secar al aire.

Consejos para cuidar el buen estado de tus prendas

Los errores antes mencionados son los encargados de encoger o dañar tus prendas, por lo que si quieres prolongar la vida de tu ropa, debes seguir los siguientes consejos:

  • Clasifica la ropa según el tipo de tejido antes de lavarla para evitar daños cruzados entre materiales más delicados y los más resistentes.
  • Usa detergentes suaves que no dañen las fibras y opta por programas de lavado delicado cuando sea necesario.
  • Seca las prendas al aire en lugar de usar la secadora siempre que sea posible.
  • Asegúrate de leer las etiquetas y seguir las recomendaciones del fabricante.
  • Lava la ropa en cargas más pequeñas para garantizar un cuidado adecuado.
  • Sigue las recomendaciones de cantidad que indican los fabricantes de detergentes y usa solo lo necesario.
  • Saca la ropa inmediatamente después del ciclo de lavado y ponla a secar lo antes posible.

Así que ahora que conoces los errores más comunes que no tenías ni idea y están encogiendo tu ropa o dañándola, ¿qué esperas para dejar de hacerlos y comenzar a cuidar tus prendas?