Iniciar el día con un buen masaje facial no solo despierta la piel, sino que también ayuda a mantenerla firme, luminosa y libre de arrugas. Con los movimientos adecuados, puedes mejorar la circulación, reducir la hinchazón y estimular la producción de colágeno de forma natural.
Lo mejor de todo es que no necesitamos productos costosos ni tratamientos complicados, solo tus manos y unos minutos cada mañana. Pero, ¿cómo comenzar?
Cómo masajear el rostro todas las mañanas: te explicamos el paso a paso
Lo primero que debes hacer durante el masaje de cara por la mañana es siempre aplicar movimientos suaves y ligeros en zonas específicas:
- Debes dar golpecitos suaves desde la raíz de la nariz hasta la punta de la ceja.
- Aplicar ligeramente la presión con los dedos sobre las líneas de expresión y las cejas
- Masajear los nudillos a lo largo del cuello entre 15 y 20 veces con dirección a los hombros.
- Levantar el mentón y cerrar los puños con ambas manos mientras masajeas.
Recuerda que este proceso debes hacerlo con la piel limpia, por lo que es mejor hacerlo justo después de que te laves la cara. Si notas alguna arruga, insiste en esta zona con más repeticiones. Y sobre todo, no olvides que lo mejor es hacerlo cada mañana para ver resultados.
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