Los camarones son uno de los mariscos más populares en la gastronomía mundial, gracias a su versatilidad y sabor. Sin embargo, uno de los pasos más tediosos y asquerosos al prepararlos, es quitar la vena negra que se encuentra en su espalda, también conocida como "vena intestinal".
Sin embargo, este pequeño pero importante proceso puede marcar la diferencia entre un plato bien presentado y uno que pueda dejar un sabor desagradable. Además, esta pequeña “venita” contiene algunas bacterias y gérmenes que podrían llegar a causar infecciones y otras enfermedades si no se cocinan adecuadamente.
¿Por qué es importante quitar la vena negra y cómo hacerlo de forma sencilla?
La vena negra en los camarones es, en realidad, el tracto digestivo del camarón, y puede contener arena, algas y otros desechos. Según un artículo de Los Angeles Times, esta vena no es dañina para la salud, pero puede afectar la textura y el sabor, haciendo que muchos prefiramos retirarla antes de cocinar.
Afortunadamente, existe un truco sencillo para limpiar los camarones sin complicaciones y sin que mueras de asco en el intento.
Para la forma “convencional” que la mayoría de las personas aplica, necesitas un cuchillo pequeño y afilado y un palillo de dientes.
Proceso:
- Coloca el camarón en una tabla de cortar con la espalda hacia arriba.
- Con el cuchillo, realiza una incisión superficial a lo largo de la espalda del camarón, desde la cabeza hasta la cola. ¡Ojo! Ten cuidado de no cortar demasiado profundo.
- Ahora usa la punta del cuchillo o el palillo de dientes para levantar suavemente la vena negra.
- ¡Y listo! Si hay algún residuo o la vena llego a romperse, lava el camarón con agua y asegúrate de que quede bien limpio.
Ahora sí, la mejor opción para limpiar los camarones de manera rápida es usando un tenedor, sobre todo cuando se necesita preparar grandes cantidades de camarones en poco tiempo.
- Inserta un tenedor pequeño por debajo de la vena negra, justo donde se une con la cabeza.
- Desliza el tenedor a lo largo de la espalda del camarón, arrastrando la vena con él.
- ¡Y listo! La vena debería salir de una sola vez, sin necesidad de hacer cortes adicionales. No obstante, lava una vez más con agua para asegurarte que no haya residuos.
Así que ya lo sabes, si planeas cocinar un platillo con camarones, limpiarlos no tiene que parecer una tarea complicada, con este truco sencillo, podrás preparar tus mariscos de manera muy rápida y efectiva. Ya sea que prefieras usar el truco del cuchillo, un palillo de dientes o un tenedor, lo importante es encontrar el método con el que mejor te acomodes. – Con información de Cocina Fácil.