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¿Puedes tomar y comer chocolate si tienes gastritis? Te explicamos

Para la mayoría de las personas, la gastritis no es grave y mejora rápidamente con tratamiento.

Si piensas que padeces esta enfermedad, debes acudir con un médico.Créditos: Especial
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La gastritis es uno de los padecimientos más comunes en México, el cual provoca una serie de restricciones dietéticas. Es por ello que muchas personas que sufren de esta dolencia a menudo se preguntan si pueden disfrutar de ciertos alimentos, como el chocolate, sin agravar sus síntomas. 

¿Que te provoca la gastritis?

La gastritis es un término general para un grupo de enfermedades con un punto en común: la inflamación del revestimiento del estómago, explica la Clínica Mayo

"Es posible que la gastritis aparezca de manera repentina (gastritis aguda) o lentamente con el tiempo (gastritis crónica)", explica la institución médica.

Este padecimiento puede ser provocado por una infección bacteriana, el uso frecuente de analgésicos, edad avanzada, consumo excesivo de alcohol e incluso por el estrés.

En algunos casos, la gastritis puede producir úlceras y un mayor riesgo de sufrir cáncer de estómago. Sin embargo, para la mayoría de las personas, la gastritis no es grave y mejora rápidamente con tratamiento.

¿Qué es lo más dañino para la gastritis?

De acuerdo con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), los peores enemigos de la gastritis son: 

  • Ayunos prolongados
  • Alimentos picantes
  • Especias y condimentos
  • Frutas cítricas o ácidas
  • Bebidas con alcohol o cafeína
  • Refrescos 
  • Tabaco
  • Alimentos muy calientes o muy fríos

¿Qué pasa si tengo gastritis y como chocolate?

La combinación de chocolate y gastritis es una de las peores, señala el IMSS. Y es que si padeces esta enfermedad debes tener especial cuidado con este tipo de alimentos, pues pueden provocar ardor y acidez estomacal. 

Pero el chocolate no es lo único que debes evitar, también están prohibidos todos los productos de pastelería, helados, café, cocoa e incluso el té. 

Debes recordar que cada persona es diferente, por lo que siempre es recomendable consultar con un profesional de la salud para adaptar la alimentación y el tratamiento a tus necesidades específicas. 

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