El jabón es un compuesto que puede emplearse tanto para la limpieza personal como para el aseo de los trastes o las prendas que portamos en el día a día.
Hay quienes usan una misma barra para varias actividades, como la de la popular marca Zote. Pero hay algunos más que prefieren emplear un producto diferente para cada tarea del hogar.
Hoy te hablaremos de las propiedades de este artículo, así como de qué pasa si empleas un jabón con cuarteaduras o uno al que ya le aparecieron manchas naranjas.
¿Cómo se obtiene el jabón?
El jabón se obtiene por un proceso de saponificación, que se explica en la Revista Digital Universitaria de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
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De acuerdo con la publicación ‘La química del jabón y algunas aplicaciones’, la materia prima consiste en una mezcla de grasas de origen animal o aceites vegetales con un alcalí.
“Un jabón contiene las sales de sodio o potasio de los ácidos grasos, producto de la mezcla de un cuerpo graso (triglicéridos con un álcali, que puede ser hidróxido de sodio o de potasio)”, se precisa en el portal de la máxima casa de estudios.
¿Qué pasa si uso un jabón vencido?
La mayoría de los jabones que circulan en el mercado están hechos para tener una vigencia de 3 años. Luego de ese tiempo pierden efectividad contra las bacterias.
Es posible que no te pase nada si utilizas una barra que ya esté vencida, pero no tendrás la misma protección contra gérmenes (sobre todo si ya no genera espuma). Además, puedes lastimarte la piel si la tienes sensible y generarle erupciones cutáneas.
¿Por qué el jabón se cuartea?
Cuando un jabón se cuartea puede ser por varias razones: ya se le pasó la fecha de vencimiento o estuvo expuesto sin utilizarse y a la intemperie por largo tiempo.
“Otra señal de que el jabón es demasiado viejo son las manchas anaranjadas. El color naranja se debe a que el aceite del jabón se vuelve rancio. Aunque todavía es técnicamente seguro de usar, el jabón no huele muy bien”, se indica en el portal Infobae.
En esos casos es mejor deshacerse del producto, pues ya ha perdido efectividad al momento de remover manchas y ayudar en el combate a los microorganismos.
Así que ya lo sabes: si te encuentras un jabón con demasiadas grietas o incluso con manchas naranjas, lo mejor es deshacerse de él y no usarlo más para evitar afectaciones en la piel.
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