¿Te sobró pasta y quieres recalentarla sin que pierda su textura y sabor? Aquí te compartimos un truco infalible que dejará tu pasta tan deliciosa como recién cocinada.
- Coloca la pasta en el plato
Coloca la pasta en el plato Coloca la cantidad de pasta que deseas recalentar en un plato apto para microondas. Es importante distribuirla de manera uniforme para facilitar el proceso de calentamiento.
- Haz un hueco en el centro
Con la parte posterior de una cuchara, haz un pequeño hueco en el centro de la pasta. Este paso es clave para mantener la humedad durante el recalentamiento.
- Agrega un cubo de hielo
Coloca un cubo de hielo en el hueco que creaste en la pasta. El hielo derretirá gradualmente mientras la pasta se recalienta, creando humedad que evita que se seque y endurezca.
- Calienta en el microondas
Cubre el plato con una tapa apta para microondas o utiliza papel film perforado para dejar escapar el vapor. Calienta la pasta en el microondas a baja potencia (aproximadamente al 50 por ciento de la potencia máxima) en intervalos cortos de 30 segundos a 1 minuto. Esto ayuda a calentarla de manera uniforme sin sobrecocinarla.
- ¡Disfruta!
Revuelve y disfruta Una vez que la pasta esté caliente, retira el plato del microondas con cuidado. Retira el cubo de hielo derretido y revuelve la pasta para distribuir la humedad de manera uniforme. ¡Tu pasta recalentada estará lista para disfrutar!
¿Cómo hacer que tu pasta no se reseque por recalentarla?
Si la pasta está muy seca al recalentarla, puedes agregar un poco de salsa o aceite de oliva antes de calentarla para mejorar su textura y sabor.
Asegúrate de ajustar el tiempo de calentamiento según la potencia de tu microondas para evitar sobrecocinar la pasta.
Este truco también funciona con otros platos de pasta, como lasañas o macarrones.