Seguro te ha pasado que, cuando estás en el supermercado, justo frente a los huevos, te preguntas cuál elegir para llevar a casa. ¿Campero?, ¿orgánico?, ¿libre pastoreo? Aunque algunos son bastante evidentes en cuanto a sus diferencias gracias a su color, otros, sin embargo, no parecen tener sentido. Sin embargo, sí lo tienen. Aquí te lo explicamos.
En la actualidad, los consumidores tienen la oportunidad de elegir entre una variedad de opciones, cada una con sus propias características y procesos de producción. Estas categorías no solo reflejan diferencias en las prácticas de crianza de las aves, sino también en términos de calidad nutricional y bienestar animal.
Entonces, ¿cuál es la diferencia?
La diferencia entre huevo campero, huevo orgánico y huevo de libre pastoreo es la siguiente, según el portal de Dallas News:
- Huevo campero: Las gallinas tienen acceso al aire libre durante parte del día, pero también pueden estar en jaulas o espacios interiores. Su alimentación no tiene restricciones específicas.
- Huevo orgánico: Las gallinas son criadas en libertad, sin jaulas, y tienen acceso a un espacio exterior con pastoreo. Su alimentación se compone de productos orgánicos certificados, libres de pesticidas y transgénicos.
- Huevo de libre pastoreo: Las gallinas tienen acceso al aire libre y pastoreo durante la mayor parte del día, con un espacio mínimo por ave. Su alimentación puede incluir ingredientes no orgánicos, pero no se permiten hormonas ni antibióticos.
Básicamente, las etiquetas establecen el impacto en el bienestar del animal, así como su valor nutricional, sabor, textura y hasta el precio.
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¿Cuál tipo de huevo es mejor?
Sobre cuál elegir dependerá del gusto de cada consumidor. Sin embargo, la experta Ana Luz Zepeda, que trabajó en la granja en El Salto, explicó a ‘Dallas News’ que la mejor decisión es el huevo de libre pastoreo. Aunque no se ha probado que tengan mejores nutrientes, sí se destacan los procesos con los que se alimentan a las gallinas.