¿Sabías que México es el país donde se consume más refresco en todo el mundo? Lo anterior estaría matando al año a poco más de 20 mil mexicanos, debido a la alta ingesta calórica, de acuerdo con datos de El Poder del Consumidor.
Si bien, son múltiples las causas del incremento generalizado del sobrepeso y la obesidad, existe evidencia de que el consumo de bebidas azucaradas como los refrescos, aumenta el riesgo de padecerla, aunado a otros padecimientos como la diabetes tipo dos y otras enfermedades crónicas, así lo señala el Instituto Nacional de Salud Pública.
Pero ante este panorama surge la duda: ¿Puedo dejar de consumir refresco de un día para otro? ¿Qué le pasará a mi cuerpo si dejo de ingerir esta bebida?
El texto "Somos lo que bebemos. El bienestar de la sociedad mexicana en juego" publicado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), refiere que una persona adulta que consume cuatro botellas de 600 mililitros de refresco de cola, "está ingiriendo una cantidad que equivale a 50 cucharadas cafeteras de azúcar de cinco gramos cada una, es decir, bebe más de 500 por ciento de la ingesta diaria de azúcares recomendada".
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Es decir, el refresco está dañando lentamente tu cuerpo, por ello debes dejar de beberlo y cambiar este por agua, la cual no solo te hidratara; la Clínica Mayo nos recuerda que dependemos del agua para sobrevivir, pues este líquido logra:
- Eliminar los desechos a través de la orina, la transpiración y las deposiciones.
- Mantener tu temperatura en niveles normales.
- Lubricar y amortiguar las articulaciones.
- Proteger los tejidos sensibles.
¿Cómo dejar de beber refresco sin morir en el intento?
Luego de saber la información anterior sin duda querrás dejar de beber refresco, aunque ojo: algunos ingredientes que incluye esta bebida son adictivos, destaca la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Por lo que podrías generar un síndrome de abstinencia, el cual provoca dolores de cabeza, dificultad para dormir y nerviosismo
Para lograr dejar de depender de esta bebida Healthline, un sitio de información al consumidor sobre salud, recomienda lo siguiente:
Bebe más agua. En ocasiones puedes confundir el antojo de refresco con sed: "Si sientes la necesidad de beber refrescos, intenta beber primero un vaso grande de agua y espera unos minutos. Es posible que notes que el antojo desaparece después de calmar tu sed".
Entre otros tips también destacan: asegurarte de que no haya refrescos en tu casa ni en áreas de fácil acceso para ti; evita pasar hambre, pues este es un factor clave de los antojos, incluidos los de refrescos. Finalmente, no intentes reemplazar los refrescos con jugos de frutas.