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Queso de puerco: este es el tip para que te dure más tiempo y en buen estado en el ‘refri'

Este truco es una opción versátil para quienes desean mantener en óptimas condiciones su queso de puerco.

¿Sabes cómo se elabora este alimento? Aquí te contamos. Créditos: Especial
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El queso de puerco es un alimento tradicional en muchas mesas mexicanas, conocido por su sabor característico y su versatilidad en diversos platillos. Sin embargo, su conservación puede ser un reto, ya que, como otros embutidos, tiende a perder frescura rápidamente si no se almacena correctamente.

Por suerte, existe un truco sencillo y efectivo que permite prolongar su vida útil en el refrigerador, asegurando que conserve su sabor y textura por más tiempo. 

¿Cómo conservar el queso de puerco? 

Si eres amante del queso de puerco y deseas disfrutarlo durante varios días sin que pierda su calidad, este consejo te será de gran utilidad.

La clave está en almacenarlo al vacío y luego refrigerarlo, una técnica recomendada por expertos en conservación de alimentos y mencionada en el portal de cocina Directo al Paladar.

Para aplicar este truco puedes usar simplemente una bolsa con sello, como las famosas de la marca Ziploc.

Con dicha práctica podrás evitar la proliferación de bacterias y mantendrás el embutido en condiciones óptimas, sin necesidad de conservadores adicionales. 

Además de utilizar el envasado al vacío, se recomienda mantener el queso de puerco en el área más fría del refrigerador. De esta manera, el embutido se conserva en un ambiente estable y fresco. 

Este método de almacenamiento no solo es efectivo para el queso de puerco, sino también para otros embutidos, como jamón, salami y mortadela, los cuales pueden beneficiarse del envasado al vacío para una mayor durabilidad.

¿Qué es y qué contiene el queso de puerco?

El queso de puerco es un tipo de embutido que, a pesar de su nombre, no es un queso en el sentido tradicional. Se elabora principalmente con partes de la cabeza de cerdo, como mejillas, lengua y piel, las cuales se cocinan y prensan en moldes, formando una textura gelatinosa y compacta.

Para darle sabor, suele contener especias, vinagre, ajo y sal, lo que le otorga un gusto intenso y característico. Se trata de un alimento versátil que se consume en rebanadas, especialmente en bocadillos y antojitos mexicanos.

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