Las persianas han ido ganando preferencia en los hogares ya que contrario a las tradicionales cortinas, éstas no se tienen que lavar de manera frecuente para que luzcan impecables; sin embargo, entre su adecuado mantenimiento sí se encuentra una buena limpieza, misma que muchas de las personas no saben llevar a cabo de forma correcta, por lo que te explicamos cómo limpiar las persianas de tu hogar para que queden como el primer día.
Este tipo de artículos de decoración se han convertido en los favoritos de las viviendas debido a que su colocación –aunque es un poco costosa- trae consigo múltiples ventajas.
Algunas de las ‘bondades’ que trae la colocación de persianas se encuentran: permiten una opacidad absoluta, puedes controlar la iluminación, frena la contaminación acústica, evita la suciedad, permite la intimidad y privacidad, aumenta la seguridad de las estancias, protege tu hogar de las inclemencias meteorológicas y hasta de los insectos y pequeños animales.
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¿Cómo limpiar las persianas?
Si tienes persianas en tu hogar seguramente has comenzado a notar que el brillo y la tonalidad que tenía cuando recién las adquiriste se ha perdido, lo cual es producto del tiempo y la suciedad.
Bueno pues la adecuada limpieza de este artículo de decoración dependerá del material con el que esté hecho pues recordemos que hay persianas de madera, plástico, pvc, aluminio y tela.
En el caso de las persianas de plástico, aluminio o pvc deberás tener a la mano agua, detergente líquido, vinagre blanco, bicarbonato de sodio, cepillo suave, esponja, así como un paño de microfibra y realizar el siguiente procedimiento:
- Primero deberás cerrarlas por completo.
- Después con la ayuda de un cepillo, paño, plumero o aspiradora retira el polvo.
- Luego deberás preparar en un recipiente agua, jabón líquido, bicarbonato y vinagre.
- Sumerge tu esponja o paño dentro del balde con la mezcla, exprímela varias veces y procede a limpiar las persianas.
- Realiza movimientos delicados de arriba a abajo e izquierda a derecha, limpiando las persianas por ambos lados. No olvides escurrir la esponja o el paño antes de limpiar las persianas para evitar la acumulación de suciedad o humedad.
- Después con un trapo limpio y agua, limpia cada lámina para retirar la poca suciedad que le haya quedado.
- Finalmente deberás esperar a que las persianas se sequen naturalmente para poder abrirlas nuevamente.
Por su parte, las persianas de tela son más delicadas por lo que lo recomendable es limpiarlas al menos una vez a la semana. El mejor aparato que puedes tener para su limpieza es una vaporeta, la cual tiene la capacidad de acabar con la mayor parte del polvo, las bacterias y los gérmenes.
- En este caso se recomienda desmontar la persiana para limpiar con mucha cautela cada lámina.
- Aquí puedes preparar una mezcla de agua y jabón líquido.
- Con la ayuda de una esponja limpia las persianas a profundidad, evitando frotar de manera brusca.
- Luego enjuaga con un trapo húmedo y elimina el exceso de agua con una toalla.
- Deja que las persianas se sequen naturalmente.
En tanto que las persianas de madera se realiza el mismo procedimiento que los antes señalados pero en la mezcla deberás añadir agua y vinagre, debido a que se debe evitar cualquier producto químico.
Ahora ya sabes cómo limpiar las persianas de tu hogar para que queden como el primer día, sigue nuestros consejos y devuélveles la vida a tus persianas.