Las agujetas que conocemos hoy en día son unos cordones que llevan los zapatos y que terminan en una punta metálica o de plástico. Tienen la función de evitar que tu zapato se salga o se mueva. Puedes ajustarlas como prefieras y además las puedes poner y quitar cuantas veces desees.
En la actualidad hay de diferentes materiales, de muchos colores, con una gran variedad de medidas, etc. Pero… ¿sabes quién las inventó?
El ejemplo más antiguo conocido de un zapato con cordones es el Areni-1 del 3,500 a. C., el cual fue descubierto en 2008 en Armenia por la estudiante de posgrado Diana Zardaryan, según el sitio Shoelace History. El arqueólogo Gregory Areshian captó en fotografía dicha prenda antigua encontrada en una cueva:
Sin embargo, a pesar de este hallazgo, no se sabe a ciencia cierta en qué momento surgieron las agujetas o cordones, pues desde hace miles de años se tiene registro de los mismos o al menos de algo parecido. Por ejemplo, los gladiadores usaban sandalias que tenían correas de piel.
Lo que sí se sabe con certeza es quién patentó por primera vez las agujetas.
¿Quién patentó las agujetas de zapato?
Pues se trata nada más y nada menos que de Harvey Kennedy. Kennedy era un hombre británico que se dedicaba a crear y arreglar calzado. Y fue en marzo de 1790 que revolucionó el mercado de los zapatos al sujetar el final de los cordones con una pequeña lamina metálica con el fin de que los hilos no se soltaran.
A la vez, esto permitió que fuera más fácil el poner y quitar las agujetas, pues fácilmente entraba y salía el cordón de los pequeños agujeros de los zapatos, además que prolongaba la vida de los mismos pues no se deshilachaban con facilidad.
A la punta de las agujetas se le llamo “herrete” y surge del combinar la palabra hierro con el sufijo -ete, que es comunmente utilizado para formar diminutivos.
Esta revolucionaria idea triunfó y comenzó a comercializarse rápidamente, incluso se llegó a usar oro y plata para pedidos especiales de las personas de clase alta. Al poco tiempo, después de vender miles de piezas, Kennedy logró hacerse millonario... y la industria del calzado se transformó para siempre.
Muchas veces ignoramos el origen de las pequeñas cosas cotidianas: las agujetas son algo que vemos y usamos a diario, así que la próxima vez que las sujetes ahora tendrás en mente que no existirían tal y como hoy las conocemos de no ser por Harvey Kennedy. Con información de El Mundo, National Geographic y Shoelace History.