¿Sabías que portar apellidos con guion contribuye a tener ‘éxito social’? Al menos así se planteó en un estudio publicado por las universidades de Alicante, Murcia y Carlos III de Madrid.
No es la primera vez que tocamos el tema del origen de los nombres que nos dan identidad, incluso te hemos brindado información respecto a en qué siglo pudo haberse originado el tuyo.
Los apellidos con guion no son otra cosa que un tipo de apellidos compuestos y surgieron aproximadamente en el siglo XII, según el libro ‘Origen de 300 apellidos castellanos y vascongados’.
En la República Mexicana contamos con algunos ejemplos, como ‘López-Gatell’ o ‘Fernández-Veró’ (el apellido del nombre real de Talina Fernández), pero en realidad predominan más en España por dos motivos:
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- Conservar el nombre y/o linaje de un personaje ilustre.
- Unir el primer apellido con una propiedad perteneciente a una familia.
Eso permitía diferenciar o dar una cualidad importante a algunas personas, para quienes en la antigua estructura de clases era necesario sobresalir de entre los estratos y tener más reconocimiento.
¿Por qué se puede tener ‘éxito social’ con los apellidos con guion?
De acuerdo con el estudio realizado por las universidades de Alicante, Murcia y Carlos III de Madrid, publicado en la revista Investigaciones Económicas, es más beneficioso tener este tipo de distinciones en el nombre.
Los académicos se dieron cuenta de eso al analizar el comportamiento de la sociedad española del siglo XIX, pues la gente comenzó a implementar sus apellidos con guion pese a que ya no tenía la misma funcionalidad que en el siglo XII.
En realidad lo hicieron más por prestigio y como ejemplo se colocó el caso del doctor que se apellidaba García Sal. Tal fue su reconocimiento que sus descendientes, que se dedicaron a la misma profesión, adoptaron García-Sal más su apellido materno para adjudicarse la misma autoridad.
En ese sentido, el investigador Ignacio Ortuño descubrió una constante, pues la mayoría de quienes realizaban esa práctica estaban dedicados a ocupaciones ‘de alta reputación’, como la medicina o la abogacía.
El experto refirió esa variable como un tipo de ‘éxito social’ porque también analizó que el número de personas de apellidos comunes con profesiones ‘acomodadas’ fue 20% menor que en quienes llevan apellidos con guion. Claro que esto fue un caso de análisis del siglo XIX, así que debemos considerar que para estar alturas las cosas quizá cambiaron.
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