Estilo de vida

ALIMENTOS

¿Cuál es la diferencia entre el jamón comercial, fino y extrafino?

El jamón es un alimento que se ha ganado un lugar en la mesa de muchos mexicanos; te explicamos la diferencia entre el comercial, fino y extra fino.

¿Cuál es la diferencia entre el jamón comercial, fino y extra fino? Te explicamos. Créditos: Especial
Escrito en ESTILO DE VIDA el

El jamón es un alimento que se consume de manera frecuente en los hogares de México, así como muchas otras partes del mundo, por lo que es importante conocerlo bien y conocer las diferencias que existen entre los tipos de jamón, pues hay comercial, fino y extra fino. 

De acuerdo con información de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), en el país existe una gran variedad de marcas que se dedican a la venta de este tipo de productos conocidos como embutidos o carnes frías. 

Por ello, realizaron un estudio en la Revista del Consumidor número 522 en el que analizaron 44 marcas de las diferentes clasificaciones comerciales, para determinar qué tan buenos son los jamones que se venden en el mercado nacional.

Jamón. Créditos: Pixabay

¿Cuál es la diferencia entre un jamón extra fino, fino y comercial?

La diferencia entre el jamón comercial, fino y extra fino es la calidad de los productos, pues según Profeco unos aportan más proteína y menos grasa que los otros. 

En primer lugar se encuentra el jamón extra fino, es decir, los que contienen el mayor porcentaje de proteína libre de grasa que el resto con al menos 18 por ciento. Junto con los jamones finos son los que menos grasa y menos agua contienen, además, una característica particular es que no agregan fécula o soya.

Después está el jamón fino, cuyo contenido de proteína libre de grasa se encuentra un poco por debajo del de los jamones extrafinos ya que presentan un 16 por ciento como mínimo. En cuanto a la grasa los igualan con hasta 6 por ciento, su contenido de agua es de hasta 76 por ciento y pueden tener soya pero no fécula.

Jamones. Créditos: Freepik

Luego están los jamones preferentes, que pueden tener 14 por ciento de proteína, 8 por ciento de grasa y hasta 76 de agua. Estos sí pueden tener soya y fécula. 

El jamón comercial tiene un 12 por ciento de proteína libre, así como 10 por ciento de grasa y, de igual manera que los jamones económicos contienen 76 por ciento de agua, soya y hasta 10 por ciento de fécula.

Sin embargo este no es el último escalón, pues también existen los llamados jamones económicos, que tienen menos proteína que todos los demás con sólo 10 por ciento, así como un mínimo de 10 por ciento de grasa.

El jamón que se vende dentro de la República Mexicana puede estar hecho de pierna de cerdo al 100 por ciento, carne de muslo de pavo y combinaciones entre ambas carnes, con mayor porcentaje de una sobre otra.