Desde que tienen su primera menstruación, las mujeres comienzan un largo camino por encontrar el producto que mejor les funciona para contener los molestos bajones o derrames que las hacen sentirse inseguras mientras realizan sus actividades diarias. Y es que muchas se preguntan ¿qué opción es más saludable para la higiene femenina íntima?
Un estudio publicado en la revista británica Lancet Public Health que analizó otros 43 estudios realizados con una muestra de 3 mil 300 mujeres y jóvenes de países ricos y pobres, descubrió que el 70 por ciento de las mujeres que comenzaron a usar la copa siguieron la prefirieron una vez que se familiarizaron con su funcionamiento.
A la par, reveló que la fuga fue similar entre las copas menstruales, toallas sanitarias y tampones en tres de los estudios analizados. Sin embargo, hay diferencias entre cada uno de ellos que pueden hacerlos los favoritos de algunas y los enemigos de otras.
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Entonces ¿qué es más saludable? ¿Las toallas, el tampón o la copa menstrual?
Estos tres productos de higiene femenina tienen grandes diferencias entre ellos, desde las forma de uso, su composición y las enfermedades que pueden ocasionar. Sin embargo, la copa menstrual es la única que no contiene químicos, pues está hecha de silicón quirúrgico o látex.
A pesar de ello, existen ventajas y desventajas en cada uno de estos productos que podrían llevarte a elegir uno en lugar de otro. Te los compartimos a continuación.
- Toallas sanitarias
Esta es la mejor opción para quienes no quieren insertar un objeto extraño en su cuerpo, ya sea por comodidad o porque no han tenido relaciones sexuales, pues solo se ponen en la ropa interior de forma superficial. Con las toallas no hay riesgo de contraer el síndrome del shock tóxico, una infección bacteriana que se puede formar al dejar un tampón por mucho tiempo en la vagina, lo que comienza a absorber sus lubricantes naturales.
Sin embargo, tienen gran presencia de químicos, pues el algodón y las otras fibras de las que están hechas son tratadas con cloro, dioxina y otros químicos que si se usan de forma regular resultan inofensivos. Pero si tomas en cuenta que a lo largo de su vida una mujer tendrá alrededor de 480 períodos, el riesgo de desarrollar cáncer de ovario o cervix aumenta significativamente.
Además pueden llegar a provocar rozaduras y no son amigables con el ambiente, ya que en toda su vida una mujer utilizará alrededor de 10 mil toallas sanitarias.
- Tampones
Los tampones son los más discretos y los más cómodos, pues son prácticamente imperceptibles. No obstante, al usarlos corres el riesgo de sufrir el Síndrome del Shock Tóxico, pero lo puedes evitar cambiando tu tampón constantemente para evitar que absorban los lubricantes naturales de tu vagina.
Otra desventaja es que las fibras utilizadas en los tampones son tratadas con una gran cantidad de químicos, lo que puede resultar más perjudicial que las toallas, pues están en contacto directo con las paredes de la vagina. Tampoco son eco-friendly.
- Copas menstruales
A diferencia de los tampones, las copas no absorben nada y solamente contienen los fluidos por lo que las posibilidades de contraer el Síndrome del Shock Tóxico es prácticamente inexistente, no tiene ninguna clase de químicos, necesitan menos cambios al día que una tampón o una toalla, pues bastará con una vez al día; y son eco-friendly.
Una copa menstrual puede durar hasta 10 años por lo que estarás generando menos desperdicios que usando toallas o tampones.
No obstante, la inserción de la copa puedes ser complicada al inicio y tendrás que estreilizarla después de cada cambio para evitar infecciones lo que puede llevarte algún tiempo. Además, su costo es mayor al de las toallas y tampones, pero solo tendrás que hacerlo una vez.