La salsa Valentina es una de las que más se consumen dentro del mercado, dada su fácil transportación y que en México solemos ponerle picante a todo: a las papitas o cualquier botana, y hasta a un buen guisado si no tienes salsa casera. Por eso, hoy te decimos cuál fue la calificación que obtuvo al ser evaluada por la Profeco.
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio de varios tipos de alimentos para determinar qué tanto sodio tenía cada uno. Entre las marcas analizadas había cereales, galletas, salsas y hasta tortillas.
Allí se encontró con que muchos de los productos tienen más sal de la recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), incluida la salsa Valentina. Aunque, todo depende de cuál sea la comida con la que se combina.
La salsa Valentina por sí sola no es tan perjudicial
En la investigación de la dependencia reveló que una botella de 350 mililítros tiene 2030g de sodio. Si bien se consume en porciones pequeñas, es decir, no todo el envase, puede resultar dañino si se mezcla con un alimento con todavía más sal.
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“En estos productos es muy importante la cantidad que se consume ya que entre más cantidad más sodio, además hay que considerar a qué alimento acompaña. Por ejemplo, en el Estudio de Calidad de Papas Fritas, publicado en febrero de este año (edición 528), se consideró que un producto de 100 g de papas contiene 770 mg de sodio, y si adicionamos 30 g de salsa picante Tamazula (o cualquier otra marca) con 695 mg se estarían consumiendo 1465 mg de sodio, lo que equivaldría al 73.3% de la ingesta de sodio recomendada por la OMS al día”, se leyó en el estudio.