El café es la segunda bebida más consumida en el mundo, tan sólo después del agua. Sin embargo, existen algunas personas que creen que se trata de un líquido que, más que ayudar, podría ser dañino para la salud.
Lo cierto es que el café por sí mismo no produce enfermedades, pero su consumo en exceso o bajo ciertas condiciones puede tener efectos negativos en la salud de algunas personas.
Debido a que contiene cafeína, una sustancia estimulante que puede afectar el sistema nervioso central, el café debe consumirse con moderación; según especialistas, lo adecuado es no sobrepasar más de 4 tazas al día.
En dosis moderadas, sin embargo, la cafeína proporciona un impulso de energía y mejora la concentración. Si una persona es sensible a esta bebida, también se recomienda reducir la cantidad de cafeína o dejarla por completo. Algunos síntomas son:
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- Nerviosismo
- Insomnio
- Aumento de la frecuencia cardiaca
- Acidez estomacal
- Aumento en la presión arterial (hipertensión)
En este sentido, el café consumido en exceso podría aumentar el riesgo de enfermedades como osteoartritis, artropatía y obesidad, según detalló Elina Hypp-nen, profesora de la Universidad de South Australia, durante un estudio sobre el café.
¿El café es bueno o malo?
Entonces, tomando en cuenta estas señales, es importante decir que, con moderación, el café podría ser más beneficioso para la salud que dañino. Incluso, el consumo limitado de café ayuda a reducir las probabilidades de padecer enfermedades, según subraya la revista National Geographic. Entre ellas están:
- Cáncer de hígado
- Cáncer colorrectal
- Reduce los efectos del envejecimiento
- Ayuda a bajar de peso
- Reduce las posibilidades de padecer diabetes tipo 2
- Protege al corazón
- Alzheimer
- Dolores de cabeza esporádicos
- La depresión
¿Qué pasa ti tomas café todos los días?
Es importante destacar que los efectos del café varían de una persona a otra. Algunas personas pueden disfrutar de una o dos tazas de café al día sin experimentar problema alguno, mientras que otros podrían quedar saciados con media taza.
Es importante moderar el consumo de café y estar atento a cualquier reacción o molestia. En caso de dudas, siempre es recomendable acudir con un nutriólogo para encontrar cuál es la cantidad adecuada para cada persona.