Las rosas son las flores que nunca van a pasar de moda, se utilizan para regalárselas a un ser querido, como un producto sorpresa o recibir a alguien.
Ante el consumo de las flores, es común que las huelan y su aroma hipnotice a quien se las regalaron, pero ¿por qué huelen rico?
¿Qué causa el olor de las flores?
Los olores de las rosas gustan mucho y biológicamente es un aroma que cumple con una función, que es atraer a polinizadores, para después reproducirse.
“Algunas flores ofrecen recompensa, otras simplemente los engañan y las orquídeas son expertas”, informó la UNAM.
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El noventa por ciento de las rosas necesitan de animales para atraer a polinizadores y los insectos que más atraen son abejas.
Sin embargo, cuando ya se poliniza, la flor ya no sirve para nada “y la planta se deshace de ella”. Algo contrario a lo que sucede cuando la rosa no huele, pues “la polinización se retrasa y la flor se mantiene”, menciona el catedrático Físico Antonio Ruiz de Elvira.
Por tal razón, esta es una estrategia para proteger sus flores, ahuyentar depredadores o atraer polinizadores como: insectos, aves o mamíferos.
Y ese olor que desprende es porque lo utilizan como “un mensajero químico para comunicarse con otros organismos”, mencionó la Universidad EAFIT.
Además, el aroma de las rosas es muy representativo porque su extracción se usa en fragancias que se realiza por método de destilación y es muy común que se use para jabones, cremas, aguas de colonia, sales, entre otros.
“Las flores forman plumas de olores que atraen a los polinizadores, fundamentales en la polinización y posiblemente en la fecundación”, comentó Rocío Santos Gally, investigadora del Instituto de Ecología, de la UNAM.