Las salsas son algo peculiar de las y los mexicanos, pues nuestra gastronomía se compone por lo general de esos productos picantes caseros. Sin embargo, también existen otras hechas con algunos conservadores, como la Botanera.
Esta salsa está entre las más populares que se consumen en México, junto con la Valentina y la Tamazula, pues son buenas opciones para darle más sabor a los chicharrones, a la fruta y hasta las papas.
De acuerdo con su página oficial, hay cuatro variedades de la salsa Botanera:
- Clásica: la que contiene el sabor original
- Con limón: para los amantes del sabor más ácido
- Muy picante: para quienes disfrutan del picor en su más alto nivel
- Reducida en sodio: esta presentación contiene 80 por ciento menos sodio
- Salsa verde: para los que buscan un sabor casero
¿Qué tan buena es la salsa Botanera?
La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) recordó a sus lectores que es importante conocer los niveles de sodio de cada producto, pues se debe calcular cuánto consumimos por día.
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En el estudio de Profeco se determina que por cada 30 gramos de salsa Botanera, existen 541 mg de sodio y, aunque este es un alto porcentaje, la salsa Tamazula supera el contenido de sodio.
En general, la Procuraduría concluyó que los artículos analizados -salsa Botanera, Tamazula y Valentina- tienen una gran cantidad de sodio por cada 100 gramos de producto, pues cuentan con más de mil 600 mg.
“En estos productos es muy importante la cantidad que se consume, ya que entre más cantidad más sodio, además hay que considerar a qué alimento acompaña”, refirió.
Por ello, en su estudio de calidad de 2021, la dependencia reveló que al comer una bolsita de papas fritas de 100 gramos, que contiene 770 mg de sodio, con 30 gramos de salsa picante, se estarían consumiendo en total 1465 mg de sodio.
Lo cual es el 73 por ciento de la ingesta de sodio diaria recomendada por la Organización Mundial de la Salud (OMS), quien estima que las personas adultas deben consumir menos de 2 mil miligramos de sodio, es decir, 5 gramos de sal.
Así que ya sabes, es necesario comer todo con medida y ser más consciente de la ingesta diaria de sodio, sobre todo de las salsas, pues el consumo excesivo de esto puede provocar enfermedades cardiovasculares, accidentes cerebrovasculares y cardiopatía coronaria, según información de la Profeco.