El café es una de las bebidas más amadas por todas las personas alrededor del mundo. Hay quienes no pueden iniciar su día sin antes haber tomado una taza de este “elixir”. Existe una gran variedad, y como suele ocurrir con cualquier otro trago, se sirve de diferente manera dependiendo el país.
Por ejemplo, en Italia es conocido el espresso, en México podría ser el café de olla, o el turco, que incluso tiene una consistencia diferente al que se sirve en otros sitios. Y aunque es muy popular, y seguramente se sirven miles de tazas al día, poco se sabe sobre su origen o por qué se llama así. A continuación te damos todos los detalles.
¿Qué significa el nombre de café?
Como suele ocurrir con sucesos o vocablos que aún no están claros, hay muchas teorías que rondan del por qué se le llama al café de esta manera. Sin embargo, la que más toma fuerza es que viene del término árabe qahwa que significa estimulante; después pasó al turco kahvé, y luego al italiano kaffe, que es similar al que conocemos actualmente.
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Según el International Coffe Organization, esto podría deberse a que su origen ocurrió en la provincia de Kaffa, en Etiopía. Aunque su procedencia no está del todo claro, ya que una de las teorías es que fueron esclavos quienes descubrieron sus beneficios revitalizantes, sí confirmaron que el café se cultivaba en Yemen en el siglo XV, pero es probable que ocurriera mucho antes.
Desde entonces se recorrió un largo camino para que llegara al resto del mundo. Por ejemplo, en América Latina, específicamente en Estados Unidos, se tiene referencia a que comenzó a tomarse esta bebida en el año 1668, en lugares como Nueva York, Filadelfia, y Boston.