La limpieza del hogar es de vital importancia para la salud y bienestar de las personas, especialmente tras la emergencia sanitaria por la pandemia de COVID-19, por lo que para tener una casa limpia es importante saber cuándo es necesario cambiar de trapeador.
Trapear o limpiar cualquier superficie usando agua, jabón y cualquier desinfectante ayuda a eliminar agentes patógenos que se concentran y pueden generar enfermedades, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Para tener una casa limpia no sólo basta con usar los mejores productos, también es necesario saber cuándo hay que cambiar de trapeador.
Cuándo debes cambiar tu trapeador
De acuerdo con expertos, lo recomendable es cambiar el trapeador al menos una vez cada mes para garantizar que cuando trapeas dejes limpia tu casa.
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Luego de este periodo de uso aumenta la posibilidad de que la jerga o mechudo que usas comience a almacenar humedad, suciedad o gérmenes que se quedan impregnados en las fibras, lo que también hace que sean más difíciles de lavar.
Las bacterias que quedan atrapadas en los trapeadores pueden generar malos olores y colaboran en la formación de hongos dañinos para la salud.
La Secretaría de Salud recomienda que al trapear o realizar la limpieza del hogar en general se utilice la técnica de las “tres cubetas”: una con agua y jabón para tallar la suciedad; otra sólo con agua para enjuagar, y una con una mezcla de agua y cloro para desinfectar al final.
Cambiar de trapeador cuando sea necesario garantiza que tu hogar quedará limpio cada vez que trapeas e impide que se dispersen gérmenes por toda tu casa que pueden dañar tu salud o la de tu familia.