Con este frío se antoja beber algo calientito y con mucho sabor, como un atole de guayaba, uno de los más populares en los estados del centro del país.
El atole de guayaba es una bebida de pulpa molida de la fruta que le da el nombre y masa de maíz, disuelta en agua y endulzada con piloncillo o azúcar, explica el Diccionario Enciclopédico de la Gastronomía Mexicana.
Si bien, dicha bebida suele prepararse con masa, también puede hacerse con leche de vaca, leche evaporada y fécula de maíz, ingredientes que le dan un toque más cremoso.
¿Cuál es el truco para que el atole de guayaba quede delicioso y no se corte?
El secreto para que el atole de guayaba quede de 'rechupete' está en agregar canela, leche evaporada y guayabas maduras; además, éstas últimas evitarán que el atole se corte.
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Ingredientes:
- 500 g de guayabas lavadas
- 1 raja de canela
- 400 g de piloncillo
- 400 g de masa de maíz
- 1 lata de leche evaporada
- 2 1/2 l de agua
Preparación:
- Pica las guayabas en cuatro partes cada una. No olvides retirar las "puntas".
- Pon a hervir las guayabas en un litro de agua, junto conel trozo de canela y piloncillo, durante 15 minutos.
- Licua las guayabas con un poco del agua que hirvió y sin la canela.
- En la olla donde prepararás el atole, cuela la pulpa molida de las guayabas, agrega el resto del agua hervida y añade un litro más. Calienta a fuego alto y mueve de vez en cuando.
- Muele la masa con medio litro de agua, agrégala al agua hirviendo y mezcla. Si quieres que el atole quede muy espeso, añádela sin colar.
- Agrega la lata de leche evaporada y mueve hasta que el atole hierva.
Sirve el atole de guayaba bien calientito y acompáñalo con unos tamales, un bolillo, pan dulce o con lo que más se te antoje. ¡Provecho!
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