La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) realizó un estudio de calidad a diferentes marcas de jamón, incluyendo el de la Bodega Aurrera. Conoce qué tan bueno es acorde a los parámetros de la dependencia, que tomó en cuenta aspectos como la información que se le ofrece a las y los consumidores, así como la calidad sanitaria.
La dependencia analizó hasta 44 productos y los clasificó de la siguiente manera: comerciales, económicos, preferentes, finos y extra finos. Aunado a que también mostró de qué tipo de carne están hechos y aspectos nutricionales, como la cantidad de grasa, sodio y carbohidratos que aportan a las personas.
¿Qué tan bueno es el jamón de la marca Aurrera?
El jamón de la marca Aurrera es bueno conforme a los estándares de la Profeco, ya que no ofreció información errónea a las y los consumidores, ni tampoco incumplió dentro del rubro de calidad sanitaria. El origen de la proteína de este producto es pavo y soya, refiere la dependencia en sus análisis publicado en la Revista del Consumidor.
La presentación de 500 gramos de este jamón aporta un 8.70 por ciento de grasa y hasta un 9.6 por ciento de proteína libre de grasa, aparte de 9.8 por ciento de carbohidratos y 130 kilocalorías por cada 100 gramos como aporte energético. En sodio contiene 0.84 gramos por cada 100 de producto.
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Este jamón tiene un precio de 35.50 pesos en Bodega Aurrera, lo cual significa que los 100 gramos apenas rebasan los siete pesos, por lo que es una de las mejores opciones para todos los bolsillos. En su estudio de calidad, la Profeco sólo analizó este producto del reconocido supermercado.
En el caso de los productos que se consideran como jamón de pavo deben estar elaborados al 100 por ciento con pierna de dicha ave; mientras que los que se ostentan como de pavo y cerdo deben tener una proporción del 55 y 45 por ciento (de forma respectiva), afirma la dependencia.
Y a todo esto, ¿quién inventó el jamón?
El jamón es uno de los alimentos en conserva más antiguos del mundo, se cree que en el año 1000 a.C. (antes de Cristo), los fenicios crearon las primeras técnicas para secar y salar la carne de cerdo, lo que posteriormente daría paso a la creación del famoso jamón serrano y que es un platillo popular de España.
Los fenicios compartieron esta técnica con los romanos, quienes a su vez la extendieron por las vastas regiones de su imperio, incluyendo lo que ahora es España. Para el siglo III a.C. (antes de Cristo), un sabio llamado Catón 'El Viejo' describió con precisión la técnica para salar y secar jamones.
Fue hasta el siglo XIX, cuando en naciones industrializadas como Reino Unido o los Estados Unidos, cuando arrancó la producción del jamón tal y como lo conocemos en la actualidad. Mientras que el jamón serrano o puro de bellota son considerados como productos de elaboración artesanal.