Si eres de las personas que cambian su esponja para baño hasta que se rompe o de plano ya no talla como cuando era nueva, te informamos que debes comprar una nueva mucho antes de que eso ocurra si quieres evitar ducharte con bacterias.
Pese a que la esponja de baño está en constante contacto con el agua y el jabón, debes tomar en cuenta la formación de bacterias.
Lo anterior se debe a diferentes factores, como el vapor. Y es que cuando aumenta la temperatura del agua, la esponja se expone a vapores y luego tarda en secarse, lo que da lugar al ambiente perfecto para las bacterias, y en algunas ocasiones para el moho y hongos, que pueden causar infecciones, principalmente cuando la piel está recién depilada, exfoliada o tiene una pequeña herida.
¿Cada cuánto debo cambiar la esponja para baño?
El tiempo de vida útil de las esponjas para baño depende del material con el que estén elaboradas, según expertos.
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A continuación te decimos cada cuánto debes cambiar este artículo para baño:
- Si utilizas una esponja vegetal de plástico, cámbiala cada cuatro o seis semanas, pero antes de este periodo aparecen manchas o tiene mal olor, considera cambiarla de inmediato.
- Si usas una esponja marina natural, debes cambiarla antes, es decir, cada tres o cuatro semanas. Esto se debe a que acumula las células muertas de la piel.
Para evitar la formación de bacterias en las esponjas de baño debes hacer lo siguiente:
- Quitar con agua todos los residuos de jabón en cuanto acabes de usarla.
- Exponer las esponjas al sol al salir de la ducha para secarlas más rápido.
Otra opción para mantener limpias estas esponjas es dejarlas remojar en una solución de agua y lejía o vinagre. Al igual que los otros artículos de higiene, las esponjas para baño son de uso personal, por lo que no debes compartirlas con nadie._Con información de la revista Vogue.