Normalmente cuando nos gusta alguien queremos saber si la otra persona siente lo mismo y preguntarle directamente muchas veces se vuelve un poco complicado. Sin embargo, estudios publicados por el Journal of Nonverbal Behavior descubrieron que con el simple hecho de escuchar su risa puedes descubrir si le gustas o no.
La capacidad del ser humano por reír aparece a los cuatro meses de nacer, y es la expresión más distintiva de emociones positivas en todas las culturas. Sally D. Farley, profesora de la Universidad de Baltimor y colaboradora del estudio, dijo: "Puede haber un modelo bidimensional de generación de la risa que distinga entre la risa espontánea (real) y la voluntaria (manipulada).
Mediante un estudio, el equipo de Farley puso a prueba su capacidad para distinguir entre la risa dirigida a dos grupos: amigos y parejas románticas.
Se recopilaron estímulos de risa de llamadas telefónicas archivadas de 5 minutos en las que participaron 27 personas que llamaron a su pareja y a un amigo cercano del mismo sexo. De las 54 llamadas realizadas en total, se tomaron las partes de risa, lo que arrojó un total de 52 llamadas de risa (tras omitir 2 llamadas que no tenían risa).
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En el primer estudio se reclutaron 50 estudiantes de la región del Atlántico medio de Estados Unidos que calificaron los 52 segmentos de risa anteriores en una escala de 1 (extremadamente desagradable) a 9 (extremadamente agradable). Escucharon cada risa por segunda vez en orden aleatorio, e indicaron si creían que la risa era por un amigo o por su pareja romántica.
Los resultados en este fueron que la risa dirigida hacia la pareja se calificó como un sonido menos agradable en comparación a la de los amigos.
Dado que las escalas de cada dimensión no estaban muy correlacionadas, los investigadores las analizaron por separado. La risa dirigida a los amigos (frente a las parejas románticas) se calificó como más ruidosa, más masculina, dominante, ligeramente más madura y menos jadeante. La risa masculina se percibió como más masculina y fría, mientras que la femenina se percibió como más ruidosa, natural, cambiante, madura, relajada y dominante.
Por otro lado en el tercer estudio solo se utilizaron 12 segmentos de risa en orden aleatorio, y un total de 252 individuos (125 hombres) reclutados en la plataforma de crowdsourcing online participaron en esta investigación.
En esta ocasión se percataron que la risa con los amigos fue calificada como más ruidosa, más cálida, más cambiante, natural, relajada, con respiración y dominante, en comparación con la risa con la pareja romántica.
Estos estudios proporcionaron cierto apoyo a la hipótesis del amor vulnerable de los investigadores, que predijo que la risa dirigida a las parejas románticas sonaría más vulnerable (por ejemplo, sumisa, cálida), revelando "el estado de relación vulnerable de la etapa inicial del amor romántico".
Finalmente Fraley y sus colegas mencionaron lo siguiente: "Los estudios futuros deberían tener en cuenta la variedad de características acústicas de la risa, como el tono, tal vez incluso a través de la manipulación artificial, para ver cómo afectan a las diferentes percepciones de la risa dentro de contextos románticos y no románticos."