El fin de semana ya está aquí y con él, la posibilidad de tomar unos 'tragos coquetos' para relajarse y retomar fuerzas. Pero si eres fan del vodka, te decimos por qué no es buena idea mezclarlo.
El vodka es una de las bebidas que durante años se ha combinado con jugos de distintos sabores frutales, como los de piña, naranja, durazno y hasta arándano.
Incluso, hay quienes se sienten animados a estas prácticas al ver que esos mismos sabores son enmarcados con ediciones especiales del vodka de su preferencia, pero esto puede no ser una muy buena idea.
La combinación de vodka con jugo no sólo podría hacerte pasar un ridículo en la fiesta o borrarte el casete, también podría causarte una resaca que te haga querer ir al hospital de manera urgente.
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Contra todo lo que sabes hasta ahora, trata de no mezclar vodka con jugo, pues esta combinación de azúcar con alcohol afectará directamente a tu organismo con demasiada glucosa.
Además de que te emborracharás más rápido de lo habitual, al día siguiente tendrás una resaca terrible y a largo plazo podrías desarrollar problemas con la insulina.
Lo mejor es tomar el vodka bien frio o mezclarlo con agua gasificada, pues esta ayudará a reducir la fuerza de la bebida alcohólica sin diluir el sabor y te mantendrá hidratado.