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Cuidado de plantas: diferencia entre abono y fertilizante, ¿cuál es mejor?

Si quieres tener tu propio huerto o cuidar tus plantas, es fundamental saber qué beneficios aporta el abono y cuáles el fertilizante.

Es importante distinguir entre abono y fertilizante para el cuidado de plantas. Créditos: Sandra Ríos
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El cuidado de plantas o de un huerto es una gran responsabilidad, la cual requiere no sólo de un arduo trabajo, sino de conocimientos que permitan desarrollar mejores técnicas, por lo que resulta indispensable distinguir entre abono y fertilizante, así como los beneficios (o perjuicios) que provocan.

Para que una planta crezca de manera saludable no sólo es importante que tenga la suficiente cantidad de agua y horas de sol o sombra, según sea el caso, sino de productos que las enriquezcan y les den los nutrientes necesarios; además de ayudan aportar sustancias orgánicas a la tierra en el caso del abono.

La principal diferencia entre abono y fertilizantes son el origen, los primeros son naturales y los segundos artificiales. Uno de los mitos más extendidos es que los abonos sólo se encargan de agregar nutrientes al suelo, mientras que los fertilizantes únicamente ayudan al crecimiento de la planta.

En el caso del abono siempre es importante elegir los de origen orgánico, entre los que se encuentran: estiércol, humus, abonos de extracto de algas y composta, esta última eleva la calidad del suelo y las plantas, debido a la descomposición de bacterias (ciclofílicas, mesofílicas, termófilas, etc.), además de hongos.

Los fertilizantes, al ser de origen artificial, alteran el ph del suelo y pueden contaminarlo. Un aspecto importante es que estos deben ser disueltos en agua para que liberen sus nutrientes y sean absorbidos por la planta, pueden ser líquidos, sólidos o de liberación prolongada.

Asimismo, existen fertilizantes para cada tipo de planta: cactáceas (cactus), plantas con flor, palmeras, bonsáis o plantas acidófilas (como azalas, camelias u hortensias). Asimismo también se dividen en relación a sus ingredientes: simples, binarios y terciarios.

La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) recomienda usar composta tanto para el cuidado de las plantas y el suelo, la cual se puede fabricar de la siguiente manera: cáscaras de huevo, restos de verdura y frutas, residuos de origen animal, follaje, tallos frescos y hojas secas.