Si te gustan las plantas y sueñas con tener tu propio huerto para echar mano de él a la hora de cocinar, te decimos cómo germinar una semilla de aguacate.
El aguacate tal vez es una de las plantas más difíciles de germinar en casa, pues requiere de muchos cuidados y paciencia lo que termina por decepcionar a quien lo intenta y termina dándose por vencido.
Para que eso no te pase, te damos una guía fácil y práctica para que te animes a germinar tus propio árbol de aguacates y obtener así todos sus beneficios como sus proteínas de alta calidad, ácidos grasos esenciales y antioxidantes como la vitamina E.
Lo primer que debes hacer es sacar la pepita o el hueso del aguacate de su interior, limpiarla y sumergir sólo la mitad en un recipiente con agua.
Para este paso tendrás que ayudarte de tres o cuatro palillos clavados en la mitad del hueso, de forma que una mitad quede sumergida en el agua y la otra no.
Una vez que hayas hecho esto, debes dejar que salga la raíz que suele tardar de tres a cuatro semanas en aparecer.
Cuando la raíz alcance unos 10 centímetros, deberás sacar el hueso del aguacate del agua, quitarle los palillos y, ahora sí, plantarlo en una maceta que hayas preparado antes con suficiente tierra.
Aunque no es es necesario que la maceta sea muy grande, sí debes asegurarte de que el hueso tenga suficiente espacio para crecer y que la mitad quede adentro de la tierra y la otra mitad fuera.
Si no te olvidas de regarla, te aseguramos que en poco más de un mes comenzaran a salirle hojas, lo que indicará que todo va bien.
Eso sí, con el tiempo habrá que ir cambiando la planta de maceta para que tenga más espacio y siga creciendo.
Si la cuidas, podrás tener tu propio árbol de aguacates que en el futuro puede darte una buena producción de estas delicias.