El pollo es una de las carnes más versátiles para preparar y se ha posicionado como la favorita de aquellos que buscan un equilibrio y también de los que prefieren alejarse de otras variedades como el puerco o la res. Sin embargo, su apariencia y también algunas prácticas que solemos tener al cocinarlo, como lavarlo, pueden llegar a ser peligrosas porque se asocian a una enfermedad. Te contamos cuál es y también qué significan aquellas estrías que quizá llamaron tu atención al ver los filetes de pollo empaquetados en el supermercado.
¿Lavar el pollo es malo?
Sobre si lavar el pollo es o no malo, hay varias versiones. Esta es una práctica común y no suelen escucharse casos de consecuencias fatales, pero el riesgo existe, al menos así lo han declarado diferentes instituciones como la Agencia de Normas Alimentarias de Reino Unido, que puntualizó que lavar el pollo antes de cocinarlo aumenta el riesgo de que se propague la bacteria campylobacter en las manos, las superficies y utensilios de comida. Si se pone el pollo debajo de la llave, puede salpicar todo y la bacteria traspasaría a los objetos, señala la BBC.
La enteritis por campylobacter es de las causas más comunes de intoxicación alimentaria y la podemos padecer por el consumo de aves crudas, vegetales frescos o leche sin pasteurizar. Medine Plus menciona que se contagia al ingerir alimentos infectados y que puede causar diarrea, dolor abdominal, fiebre, náuseas y vómitos.
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Normalmente, un cuadro por esta bacteria no pasa a más, pero a veces puede ocasionar problemas de salud a largo plazo y, como una consecuencia de la infección, podría surgir el síndrome de intestino irritado y el de Guillain-Barré, agrega la BBC.
¿Por qué no debes comer la piel del pollo del supermercado?
Uno de los mitos sobre la piel en el pollo es que ahí se acumulan las hormonas, pero esto no es así, debido a las regulaciones que existen en el mundo. Entonces, ¿por qué debes pensarlo mejor antes de comer la piel del pollo? La respuesta es que ahí está la grasa, con el 32% acumulado, aunque la mayoría es clasificada como "buena" o insaturada, como apunta un informe de Harvard. No obstante, la tercera parte no deja de ser grasa saturada con niveles de colesterol y se puede prescindir de ella.
A esta grasa se añade el aporte calórico según el método de cocción, como si se opta por freírlo o asarlo. Para reducir las cantidades se puede cocinar a la plancha, con un poco de aceite. Esto no quiere decir que jamás se deba comer la piel del pollo, si se hace de vez en cuando no tendría un efecto fuerte para la salud, pero si se abusa de su consumo, entonces es preferible dejarlo, señaló Concepción Martínez, dietista y nutricionista especializada en obesidad y sobrepeso para el diario El Español.
El significado de las rayas blancas en el pollo
Seguramente te has encontrado en el supermercado con una bandeja de pechugas o filetes de pollo que tienen rayas blancas o estrías sobre la parte rosa. Si los has comprado o consumido, no te preocupes, no son dañinos, pero sí dan indicios de la vida del animal, sobre todo si éste se sometió a un procedimiento de crecimiento acelerado. Algunos especialistas asocian estas rayas blancas con menos nutrientes.