Checo Pérez luchó como pocos pudieron haber hecho. Sabía que ser segundo piloto en Red Bull era un riesgo no sólo en la pista y aunque se defendió, hoy perdió ante la maquinaría del equipo. Chacho López desmenuzó rápidamente el despido del mexicano que jamás tuvo piedad. La naturaleza de la F1.
El piloto de Guadalajara firmó una extensión de contrato que Red Bull no quiso hacer válida por los malos resultados. Quizá al equipo se le olvidó que hay que darle un buen auto al que maneja para lograr resultados, pero siempre estuvieron enfocados sólo en Verstappen.
Chacho López, narrador de F1 para México contó cómo vio el despido de Checo Pérez y en primer lugar, no le parece algo extraño en ese equipo. Red Bull hizo todo lo posible para meter presión, para llevar contra las cuerdas al piloto y al final, hacer ver que se va por decisión propia y no por la puerta de atrás.
“Nada nuevo. Qué desaseo en la salida de Checo. El equipo hizo ver que le negoció la rescisión de contrato metiendo a los medios como elemento de presión, y al final le tuercen la mano para que sea él quien anuncie como si fuera su decisión. No lo merecían los aficionados a Checo, ni él por sus aportaciones al palmarés del equipo”, comentó el periodista.
Recordó además, que durante 14 años en la F1, Checo labró su camino con esfuerzo, con sudor y su legado es el más importante en la historia del automovilismo mexicano.
“Triunfos, podiums, carreras magistrales de por medio. Su legado al automovilismo mexicano es el más importante de la historia. ¡Gracias, Checo!”, finalizó.
¿Qué dijo Checo Pérez en su mensaje de despedida?
- Checo Pérez, en efecto, fue el primero en decir adiós con una carta en inglés y en español.
- Agradeció las 4 temporadas que estuvo arriba de un Red Bull y recordó lo importante que fue para la historia más prolífica del equipo en la F1.
- No agradeció a Christian Horner, pero sí a Max Verstappen y a todos los miembros del equipo.
- Se va Checo Pérez de Red Bull con 29 podios, 5 victorias y la mejor defensa en la historia de la F1.
