La presidenta Claudia Sheinbaum presentó el pasado 13 de enero el Plan México, una estrategia del gobierno federal junto con el sector privado para atraer inversiones al país ante la llegada del presidente electo de EU, Donald Trump.
El objetivo es colocar a México entre las 10 principales economías del mundo mediante el impulso de la manufactura local, la sustitución de importaciones, la creación de empleos y la reducción de la burocracia para facilitar las inversiones en el país.
Sobre la sustitución de importaciones, la titular del Poder Ejecutivo detalló que las que busca reemplazar, principalmente, son las de China, y sustituirlas por manufactura mexicana.
Aunado a que se pretende relanzar la estrategia "Hecho en México" para darle un valor agregado a la producción, pero ¿qué es la sustitución de importaciones y puede tener algún impacto negativo? Te explicamos.
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¿Qué es la sustitución de importaciones que busca el Plan México?
La sustitución de importaciones es una estrategia económica mediante la cual se busca sustituir los bienes importados por otros producidos de manera local, esto con el objetivo de reducir la dependencia ecoómica e incrementar la producción interna.
Al respecto, el economista Arturo Herrara, quien colabora para ADN40, detalló en su cuenta de X que entre las herramientas que se usan para implementar esta estrategia están los aranceles, así como las barreras comerciales, para que los productos importados se vuelvan más caros y menos competitivos.
Otras medidas que se pueden implementar son los subsidios a la industria nacional y las regulaciones a la mercancía extranjera.
Esta no es la primera vez que se implementa el modelo de sustitución de importaciones, debido a que fue adoptada durante el gobierno de Manuel Ávila Camacho de 1940 a 1946 para impulsar la industrialización de México. También fue usado en las administraciones de Miguel Alemán Valdés y al principio de la de Adolfo Ruiz Cortines.
El objetivo de Ávila Camacho fue aprovechar el contexto de la Segunda Guerra Mundial para que México adoptara un papel importante en la importación de productos locales. A pesar de que sí se obtuvieron beneficios para empresarios y para el sector industrial, no sucedió lo mismo con la mayor parte de la población y el descontento popular fue en aumento.
El modelo provocó el encarecimiento de los productos nacionales por la falta de oferta a causa de que se redujeron las importaciones y la reducción de productos de calidad, lo que afectó a los consumidores en lugar de beneficiarles.