El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Francisco Cervantes, adelantó que la iniciativa privada y el gobierno federal, encabezado por la presidenta Claudia Sheinbaum, ya trabajan en un plan ante los posibles aranceles que imponga Donald Trump tan sólo regrese a la Casa Blanca a partir del próximo 20 de enero.
Francisco Cervantes y la presidenta de México tuvieron una reunión este miércoles, en Palacio Nacional, donde se habló el tema de los posibles aranceles a productos que se exportan a los Estados Unidos. El presidente del CCE agregó que ya instalaron una mesa de trabajo para garantizar oportunidades a repatriados y migrantes.
Cervantes adelantó que vienen negociaciones con el futuro gobierno estadounidense, encabezado por Donald Trump, por lo que también se consultará a grupos de trabajo profesionales y así responder a las posibles acciones del republicano. Asimismo, también se trabaja con un grupo en el Senado de la República.
En la reunión estuvieron presentes 10 empresarios de Canadá (socio comercial de México junto a EU en el T-MEC), con quienes se priorizó el diálogo y se buscaron soluciones constructivas ante los futuros desafíos globales. Todos los participantes en el encuentro, llamado CEO Dialogue, coincidieron en que se deben evitar las tensiones comerciales.
Te podría interesar
A la salida de la reunión en Palacio Nacional, Francisco Cervantes adelantó que él y Carlos Slim, fundador de Grupo Caros y el empresario más acaudalado de México, viajarán a Washington D.C. para estar presentes en al ceremonia de investidura de Donald Trump, quien asumirá el cargo hasta 2029.
Donald Trump, mandamás electo en los EU, amagó con imponer aranceles de hasta el 25 por ciento a los productos que lleguen de México y Canadá, en caso de que no se realicen acciones para contener la migración ilegal ni el tráfico de fentanilo en la frontera. Incluso, aseguró que habrá una dependencia encargada de recaudar tales recursos.
En 2026, los representantes comerciales de Canadá, Estados Unidos y México se reunirán para discutir la renegociación del T-MEC. Tanto el gobierno federal como la iniciativa privada insisten en que es la única manera de enfrentar el reto comercial que significa China y otras naciones del sureste asiático.