El tequila y el mezcal, las bebidas emblemáticas de México, se verán gravemente afectados con el plan arancelario que pretende imponer a nuestro país el presidente electo de Estados Unidos, el republicano Donald Trump.
Unos 3 mil millones de dólares en importaciones de estos licores de los grandes fabricantes Diageo y la mexicana Becle, propietario de José Cuervo, están en riesgo por la amenaza de arancel del 25 por ciento que impondría Trump, según datos de aduanas mexicanas revisados por Reuters.
Donald Trump, quien asumirá el cargo el próximo 20 de enero, ha dicho que impondrá aranceles a las importaciones de México y Canadá, así como aranceles adicionales a los productos chinos, lo que afectaría a empresas en sectores desde el automotor hasta el minorista.
Estos aranceles también encarecerían la importación de populares bebidas espirituosas que no pueden fabricarse en otros países, como el tequila, utilizado en cocteles como el margarita y muy popular en todo el mundo, así como el mezcal. Los productos que llevan nombres de tequila o mezcal deben fabricarse en México, al igual que el champán francés o el queso parmesano italiano.
¿EU se quedará sin tequila?
Esto deja expuestas a empresas como Diageo, mayor fabricante de espirituosas del mundo, y la mexicana Becle, mayor productor de tequila. Juntas, dominan el mercado estadounidense de las bebidas a base de agave y dependen en gran medida de las ventas de tequila en Estados Unidos para crecer.
Las filiales de Diageo enviaron más de 25 millones de litros de tequila de México a Estados Unidos el año pasado, incluidas las marcas Don Julio, Casamigos, DeLeon y 21 Seeds, según datos de exportación mexicanos proporcionados en exclusiva a Reuters por ImportYeti.
Eso equivale a un total de 33.7 millones de botellas de 750 mililitros, calculó Reuters. Los datos hacen referencia a varias ediciones de cada marca, desde versiones "blanco" más baratas hasta etiquetas más caras como Don Julio 1942, que se vende a 139.99 dólares por botella de 750 ml en el gran minorista estadounidense de bebidas alcohólicas Total Wines & More.
Sobre la base de los precios por 750 ml en Total Wines & More, uno de los mayores clientes estadounidenses de Diageo, las importaciones estadounidenses de tequila registradas en los datos tendrían un valor de casi mil 600 millones de dólares.
Lo que está en juego
Un análisis similar de los envíos estadounidenses de Becle de ocho marcas de tequila o mezcal reveló que también tenían un valor de ventas de casi mil 600 millones de dólares.
Campari Group, el siguiente mayor fabricante de bebidas alcohólicas que cotiza en bolsa con una popular marca de tequila en Estados Unidos, envió tequila con un valor de ventas de sólo 122 millones de dólares, según el análisis de Reuters.
Diageo afirmó que cuenta con décadas de experiencia en política comercial y que siempre se ha tomado las disputas comerciales con calma. "Trabajaremos con la administración entrante en asuntos que afecten a nuestro negocio", dijo.
Becle no respondió a las peticiones de comentarios. Campari declinó hacer comentarios.
El análisis de Reuters muestra lo mucho que está en juego para los principales productores que dominan los mercados estadounidenses del tequila y el mezcal si entran en vigor los aranceles.
Las importaciones de la industria estadounidense ascendieron a 4 mil 600 millones de dólares en 2023, un 160 por ciento más desde 2019, según el Consejo de Bebidas Espirituosas Destiladas de Estados Unidos (DISCUS, por sus siglas en inglés), que ha advertido que los aranceles costarían empleos.
DISCUS dijo por separado que planeaba buscar una exención a los aranceles universales propuestos por Trump del 10 por ciento sobre todos los productos extranjeros.
Incremento de precios en tequila y mezcal
Diageo también vendió al menos 483.4 millones de dólares en whisky canadiense en el año hasta finales de noviembre, según datos de Circana que cubren las ventas en tiendas estadounidenses, lo que la deja doblemente expuesta a los aranceles a través de las importaciones procedentes de Canadá.
Junto con el tequila, las ventas de whisky canadiense de Crown Royal constituyen otra parte importante de su negocio estadounidense, en el que la caída de los resultados ha suscitado preocupación entre los inversores.
Tanto Diageo como Becle, por su parte, han pasado apuros ante la ralentización de la demanda de licores caros, a medida que se evapora el auge experimentado durante la pandemia del COVID.
En Estados Unidos, las marcas de tequila más baratas, como 818 Tequila, de Kendall Jenner, han ido ganando cuota de mercado, mientras que las marcas más caras, como Casamigos, de Diageo, han perdido terreno a medida que los consumidores se vuelven más conscientes de los precios.
El análisis de Reuters se basó en los precios de botellas de tamaño estándar en tiendas de licores en línea de Estados Unidos. Cuando no fue posible determinar la marca o submarca contenida en los envíos, Reuters asumió que contenían las botellas más baratas posibles.
En realidad, los envíos contienen botellas de distintos tamaños que se venden a distintos precios, incluso en locales como bares, donde obtienen un margen significativamente mayor.
Aunque un golpe del 25 por ciento a mil 600 millones de dólares en ventas supondría 400 millones, los aranceles suelen basarse en el valor de las importaciones y no en los precios de venta. Las empresas también tomarían medidas para mitigar el impacto de los aranceles, como subir los precios, dijo Joseph Gabelli, gestor de carteras de Gabelli Funds, inversor de Diageo.
Los analistas de Jefferies estimaron en noviembre que los precios tendrían que subir un 10 por ciento para compensar el impacto de un arancel del 25 por ciento.
Al menos en el caso del tequila y el mezcal, los aranceles no pondrían a determinadas empresas en desventaja competitiva, dijo Gabelli. La cuestión es si los bebedores estadounidenses se tragarían cualquier subida de precios, prosiguió. "¿Causaría una reducción del consumo que el tequila se encareciera? Es de suponer que habría algún efecto negativo", se preguntó.