La petrolera estatal mexicana Pemex aumentó sus pérdidas en el tercer trimestre frente a las registradas en el mismo lapso del año pasado, afectada por menores ventas, un incremento en el deterioro de activos y una mayor pérdida cambiaria, de acuerdo a su reporte financiero publicado el martes.
La pérdida neta sumó 161 mil 335 millones de pesos (8 mil 193 millones de dólares) entre julio y septiembre frente a los 79 mil 134 millones de pesos del mismo lapso del 2023, según el reporte.
Los ingresos de Pemex, la mayor empresa de México, sumaron 426 mil 122 millones de pesos, una baja del 7.7 por ciento en el trimestre debido a un menor volumen de crudo exportado y a los movimientos del peso frente al dólar.
La deuda financiera de Pemex se elevó a 97 mil 300 millones de dólares al final del tercer trimestre. Al cierre del trimestre previo de ubicó en 99 mil 400 millones de dólares.
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La producción de crudo y condensados, incluyendo a socios, bajó un 5.7 por ciento a 1.764 millón barriles por día (bpd), ante la declinación de los campos Maloob y Zaap, retrasos en instalaciones de infraestructura marina y condiciones climatológicas adversas.
La producción de gas natural promedió 3,749 millones de pies cúbicos al día (pcd) en el trimestre, una baja del 6.8 por ciento frente al mismo lapso del año pasado.
La estatal procesó 962 mil bpd en el periodo, un aumento frente a los 778 mil bpd respecto a mismo trimestre del año pasado.
Pemex sigue siendo un modelo perdedor
Enrique Quintana, director general editorial de El Financiero, aseguró que las cifras de Pemex demuestran que sigue teniendo un modelo de negocio perdedor.
"No importa que pronto se establezca en la Constitución que ya no se trata de una empresa productiva del Estado sino de una empresa pública, no hay movilidad para la compañía si los números rojos siguen siendo tan elevados", se lee en su columna para el medio especializado en negocios.
Así, sostiene que la razón principal de las pérdidas de Pemex deriva de los resultados de su filial Pemex Transformación Industrial (PTI). Acotó también que la refinación trae consigo pérdidas monumentales para la empresa.
"Con la orientación a la autosuficiencia energética, el margen de maniobra para cerrar refinerías ineficientes es muy limitado", señaló.
Quintana considera que si Pemex insiste en continuar con una operación básicamente perdedora, "su viabilidad dependerá de que nuevamente tenga enormes transferencias del sector público, cuando los recursos son escasos".