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El peso sufre... ¿y los capitales están huyendo de México? Esto advierte economista

El peso mexicano hiló este martes su sexta jornada de pérdidas frente al dólar situación que ha provocado algunas afectaciones en el sector de las inversiones.

El peso mexicano sufre frente al dólar y ocasiona salida de capitales en México Créditos: ESPECIAL
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El peso mexicano sigue sufriendo ‘descalabro’ tras ‘descalabro’, luego de que este martes hilara su sexta jornada de pérdidas frente al dólar, situación que está provocando una fuga de capitales en México.

De acuerdo con la economista y directora de Análisis Económico en Grupo Financiero Base, Gabriela Siller Pagaza, el aumento en el tipo de cambio, sumado a la caída del mercado ha ocasionado una “evidente” salida de los capitales.

“La subida del tipo de cambio y la caída en el mercado de capitales hacen evidente que están saliendo capitales de México”, dio a conocer en su cuenta de Twitter.

Según lo explicado por Siller Pagaza, hasta el pasado 12 de mayo han salido 46 mil 012.09 millones de pesos solo en 2023 de capitales que extranjeros tenían invertidos en nuestro país en instrumentos gubernamentales.

“Al último dato disponible (12 de mayo) la tenencia de valores gubernamentales por residentes del extranjero muestra una salida de 46,012.09 millones de pesos o 2.70% en 2023. Con respecto al máximo histórico de febrero del 2019, la salida de capitales ha sido de 612,963.38 millones de pesos o 26.96% del total”, detalló.

Es importante señalar que la fuga de capitales supone la salida de activos o dinero de un país como respuesta a algún suceso de carácter económico que haya tenido lugar en el mismo.

Algunos de los efectos que trae esta problemática es la disminución del nivel de riqueza y el empeoramiento de las expectativas de inversión, lo que desincentiva a los habitantes de ese país o inversiones extranjeros a participar en la economía de esa nación.

¿Qué ocasionó que los capitales estén huyendo de México?

Tal como lo mencionaba la profesora de economía en el Tec de Monterrey en sus redes sociales, el que los capitales estén huyendo del territorio nacional es ocasionado por la “subida del tipo de cambio y la caída en el mercado de capitales”.

Cabe señalar que este martes el peso mexicano sumó seis sesiones consecutivas perdiendo terreno frente al dólar, esto al rozar el piso de las 18 unidades, algo que no sucedía desde noviembre del 2021, según la economista Siller Pagaza.

De acuerdo con el Banco de México (Banxico), la moneda nacional cerró este 23 de mayo en 17.9757 unidades por dólar, por lo que la agencia Reuters dio cuenta de una depreciación aproximada del 0.49 por ciento frente al precio de referencia del lunes.

El retroceso de la divisa, el día de ayer, se dio en gran parte por el conflicto entre el presidente Andrés Manuel López Obrador con el empresario mexicano Germán Larrea.

Mientras que hoy el ‘descalabro’ fue ocasionado por los desacuerdos en Estados Unidos en el tema de la deuda.

La agencia Reuters señala que el retroceso del peso mexicano se debe a un creciente nerviosismo de los inversionistas sobre el techo de la deuda de Estados Unidos, luego de que las reuniones entre la Casa Blanca y los negociadores de los republicanos en el Congreso no produjeran avances.

En el ánimo de los mercados también pesaron expectativas de que las tasas de interés en Estados Unidos se mantendrían al alza durante más tiempo tras declaraciones de funcionarios de la Reserva Federal que insinuaron que el banco central tenía que seguir endureciendo la política monetaria.

Los negociadores de la Casa Blanca y los republicanos del Congreso finalizaron el martes otra ronda de conversaciones sobre el techo de la deuda sin señales de progreso, mientras se acercaba el plazo para aumentar el límite de endeudamiento del gobierno de 31.4 billones de dólares, bajo el riesgo de incumplimiento.

Los dos partidos siguen profundamente divididos sobre cómo controlar el déficit federal, y los demócratas argumentan que los estadounidenses ricos y las empresas deberían pagar más impuestos, mientras que los republicanos quieren recortes de gastos.