Valeria Moy, directora del Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO) opinó que el incremento en la inflación, que alcanzó el 7.94 por ciento durante la primera quincena de enero, no obedece lo que se anuncia en las mañaneras ni las proyecciones hechas por especialistas.
En tanto que la inflación superó las expectativas de los mercados la cual se esperaba que fuera de 7.86 por ciento, según un sondeo de Reuters.
"A la inflación no le importa lo que se diga en las mañanas, no le importan las expectativas", comentó Valeria Moy en el noticiario vespertino con Joaquín López-Dóriga.
Valeria Moy se mostró preocupada por el incremento de la inflación que rompe con la tendencia a la baja. Sin embargo, señaló que en tanto que la inflación es un fenómeno monetario, hay que dejar que el Banco de México haga su trabajo.
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"Yo sé que el presidente ha puesto este Paquete Contra la Inflación y la Carestía (Pacic), pero todos sabemos que es una herramienta de discurso porque el Pacic, de entrada sólo contiene 24 bienes; en segundo lugar, no es un control de precios y eso es una buena noticia. Pero de cualquier forma no ha tenido ningún impacto sustantivo", criticó Valeria Moy.
La especialista también criticó que los bienes que están contemplados por el Pacic cerraron el año con una inflación de alrededor del 12 por ciento.
"No podemos pensar que la inflación que mide los miles de bienes y servicios que consumimos todos los mexicanos pueda reducirse a los 24 bienes que conforman el Pacic", agregó Moy, quien señaló que si el Pacic fuera exitoso, sólo impactaría al 10 por ciento de los bienes que contempla la inflación.
Por lo tanto, la directora del IMCO señala que debe hacerse algo mal en política monetaria.
Valeria Moy alertó porque este crecimiento de la inflación es una regresión a la tendencia a la baja que se había tenido en diciembre.
"Este año es mucho más notoria la inflación porque se está concentrando en las cosas que compramos en un supermercado o en un mercado, que es básicamente comida", dijo Valeria Moy.
Asimismo, señaló que la inflación está impactando especialmente a los alimentos, es decir, bienes de los que no se puede prescindir, por lo tanto, afecta a los más vulnerables y deja sin margen de maniobra a los consumidores.